GETAFE/Varios (25/11/2022) – Las direcciones IP pueden decir mucho de los usuarios, ya que funcionan como un identificador.
Este puede revelar desde la ubicación geográfica, nombre del propietario, ISP hasta el historial de navegación, por lo que saber cuál es mi IP es importante para conocer las herramientas que ayudarán a protegerlo.
La dirección IP consiste en una serie de números que se le atribuyen a un equipo tecnológico. Funciona como una especie de nombre personal, por lo que podríamos decir que se trata de un código único para cada equipo, que se detecta cuando está encendido.
En pocas palabras, mi IP es lo que me hace especial en el ciberespacio. Su propósito principal es establecer un puente entre otros equipos a través de internet.
No es una información que debe estar al alcance de todos, ya que, al tenerla, una persona maliciosa puede hacerse pasar por ti. Incluso, puede robarte información y es posible que no te des cuenta.
Después de comprender su importancia es normal que te preguntes: ¿cuál es mi IP? Y es que la IP es un número único que asigna Google Fiber con el fin de tener registro de todo el tráfico de cada dispositivo y mantener así la comunicación.
Para saber cuál es mi dirección IP, existen diversos métodos. Uno de los más frecuentes es el hacer uso de una página que esté especializada en ello.
No te va a llevar mucho tiempo y hay que seguir algunos pasos que son muy sencillos para conseguirlo.
Más bien, consiste en ingresar a una página específica para saber la IP y colocar los datos solicitados. Al instante comenzará un escaneo general.
Tras unos minutos, la plataforma ofrecerá el código de la IP. Además te dará información adicional como por ejemplo si estás o no usando una VPN.
Una forma de proteger tus datos es encriptando tu dirección IP de personas maliciosas en internet. Existen muchas formas de fortalecer tu seguridad siendo una de las más recomendadas el uso de una VPN.
Una VPN se refiere a una Virtual Private Network, o red privada virtual en español. Es una herramienta digital que permite la encriptación de la IP, de forma que los hackers no pueden detectar si una persona está o no conectada.
Además, toda la información compartida dentro del túnel (como es conocido el tráfico de las VPN), estará 100% segura porque no queda registro del historial o navegación.
Es como si un fantasma hubiese ingresado a la web. El objetivo es que el usuario pueda crear una red privada y navegar con total tranquilidad. El uso de una VPN es sin lugar a dudas una excelente idea en donde toda tu información estará protegida mientras navegas y nadie podrá acceder a ella.
Hay muchas razones por las que proteger una IP, entre ellas está la privacidad en línea y evitar robo de información. No obstante, existen otras razones adicionales para hacerlo:
Encriptar mi IP es muy importante, porque los hackers no pueden rastrear tu ISP, redes de publicidad o motores de búsqueda. De esta forma, puedes navegar manteniendo el anonimato.
Al utilizar herramientas como la VPN, el uso de redes públicas deja de ser un problema de protección de datos. Las redes WiFi gratuitas permiten a los hackers obtener información privada que después usarían como ellos consideren.
Existen países que poseen muchas restricciones al nivel de contenido, al cambiar y proteger la IP podrás acceder a todo el contenido que quieras.
Expertos en ciberseguridad indican que el uso de una VPN es una de las mejores herramientas para proteger las direcciones IP. El principal objetivo es que no ocurran robos de información puede suceder con los datos de la tarjeta bancaria o similar.
Conocer cuál es mi IP es importante, puesto que las nuevas tecnologías van avanzando y los casos de robo digital están en aumento. Por ende, la protección de datos es más que vital para poder navegar sin temor a ser víctima de ellos.