GETAFE/Varios (17/1/2022)- Cada vez son más las personas que dejan su trabajo en busca de mejores oportunidades, un cambio de ritmo, un mejor sueldo o más flexibilidad. Y, para algunos, aunque lleven muchos años haciendo el mismo trabajo, cambiar de carrera aporta algo que el dinero no puede comprar: la realización personal.
Pero hay quien piensa que, por no tener 20 años y acabar de salir de la universidad, el mercado laboral no está abierto para ellos. Por suerte, esto no es cierto, especialmente cuando se trata de trabajos tecnológicos.
Sigue leyendo para saber por qué la edad no es un factor importante en el sector tecnológico y cómo el hecho de tener muchos años de experiencia en el mercado laboral puede ser una baza poderosa para conseguir un trabajo que cambie tu carrera.
Con la aparición de tecnologías y modelos de negocio disruptivos, las organizaciones de hoy en día necesitan resultados sólidos para seguir el ritmo del resto del mercado. Esto requiere personas que puedan hacer el trabajo. No importa si tienes un título universitario, si eres joven o si llevas unos cuantos años: si puedes producir resultados, eres comercializable.
Esto es especialmente cierto en las profesiones tecnológicas. Las habilidades de programación no tienen fecha de caducidad. Sin embargo, la tecnología avanza a pasos agigantados y la industria siempre está en busca de implementar nuevas y más eficientes herramientas.
En este sentido, es importante que tus conocimientos en lenguajes de programación para trabajar estén actualizados para poder aprovechar todas las oportunidades que una industria en constante expansión y evolución tiene para ofrecerte.
Asimismo, es válido acotar que los programadores de más edad pueden aportar habilidades y experiencia al trabajo de las que carecen los trabajadores más jóvenes. Si sabes cómo responder a las necesidades de una empresa mediante el código, puedes conseguir un gran trabajo con un sueldo impresionante.
La clave está en aprender primero las habilidades que necesitarás para hacer tu trabajo, luego practicarlas y después desarrollar un portafolio. En la mayoría de los casos, puedes construir tu cartera mientras aprendes a codificar.
Con la edad se adquiere una valiosa experiencia, que no se puede ganar en un aula. E independientemente de la cantidad de trabajo que alguien haga al empezar, hay algunas habilidades que solo se pueden desarrollar con el tiempo y en diferentes circunstancias.
Estas habilidades son importantes, ya que dependiendo de tu función, es probable que trabajes con otros equipos y departamentos mientras creas software. Además, las habilidades blandas son transferibles, por lo que toda tu experiencia en la resolución de problemas y la colaboración se aplicará a tu nueva carrera.
En el mundo de la tecnología, el ambiente de equipo suele ser la estructura a la que se recurre. Cuando busques nuevos puestos, destaca las experiencias que has adquirido al trabajar con profesionales de distintos ámbitos. Estas son algunas de las habilidades que puedes mencionar durante la entrevista o que puedes incluir en tu currículum:
La resolución de problemas está en el corazón de la industria tecnológica. Esto se aplica a la codificación, el diseño de redes, la ciberseguridad, el aprendizaje automático y prácticamente cualquier otra disciplina.
En cualquier trabajo de tecnología, tu responsabilidad es utilizar la tecnología para alcanzar un objetivo o abordar una necesidad. Saber cómo abordar diferentes tipos de problemas puede contribuir en gran medida a convertirte en un miembro eficaz del equipo.
Resolver problemas desde una perspectiva de alto nivel teniendo en cuenta los grandes objetivos mientras se desarrollan las soluciones.
Abordar los pequeños problemas de forma que la solución más amplia tenga más éxito, entendiendo que a veces el diablo está en los detalles.
Abordar una situación de forma creativa utilizando herramientas diferentes o inesperadas.
Pensar de forma innovadora cuando se necesita una solución que resuelva un nuevo problema.
El cambio es fundamental en la industria tecnológica, y si estás interesado en seguir una carrera en tecnología, será necesario adaptarse a los cambios tanto de personal como de tecnología.
Estas son algunas de las razones por las que un profesional con más experiencia puede manejar estos cambios mejor que alguien que es nuevo en la fuerza de trabajo.
Cuando un nuevo miembro del equipo se une a su plantilla, puede suponer sus propios retos. Pero con años de aceptar y aprender de los nuevos jugadores, un individuo más veterano puede adaptarse más rápidamente que otros.
Por ejemplo, la transición puede ser dura cuando un nuevo supervisor se incorpora al equipo y tiene un estilo de gestión muy diferente al que estás acostumbrado. Pero las habilidades necesarias para adaptarse suelen ser las mismas, independientemente del sector o la disciplina en la que se trabaje.
Tu capacidad para adaptarte a los cambios puede convertirse en un poderoso activo en un trabajo tecnológico.
Esto incluye cuando una empresa tiene que subcontratar un elemento de su tecnología a un servicio, como una empresa de ciberseguridad o un proveedor de software.
La capacidad de trabajar bien con caras y mentes nuevas puede convertirte en un valioso miembro del equipo.
Nadie entiende la necesidad de adaptarse a las nuevas tecnologías y personas más que quienes llevan muchos años en la plantilla. Con tantas nuevas tecnologías impactando tu vida personal, una lección aprendida es la rápida adaptación a los cambios técnicos que puedas tener en tu trabajo.