Analizando el proyecto de la planta fotovoltaica en el Parque Regional del Sureste

GETAFE/Reportaje (24/11/2021)- Es un proyecto que ha levantado polémica: el mayor bosque solar de la Comunidad de Madrid podría estar ubicado en Getafe. ¿El problema? Que lo hace dentro del perímetro del Parque Regional del Sureste. Y a partir de ahí han saltado las alarmas, las críticas e incluso una votación popular que ha sido contraria a la instalación. ¿Pero qué es lo que se va a implantar? ¿Qué impacto tendrá en el terreno? ¿Y qué contrapartidas habrá?.

Junto al monasterio derruido de La Aldehuela, donde antaño se hacían fiestas rave, se puede ver una verja cerrada con cadenas. Nos adentramos en ese terreno privado con los promotores del proyecto de la planta fotovoltaica, la empresa Dos Grados Capital. Un camino hasta la parte más elevada para ver la panorámica del lugar que han planteado para los paneles solares. Desde esa altura se ve el vertedero de Valdemingómez o las dos depuradoras. A nuestros pies más de 400 hectáreas de terreno agreste, que aunque no lo parezca forman parte del Parque Regional del Sureste. “Estos terrenos se utilizan actualmente como pasto de ganado vacuno”, explican los directivos.

El proyecto que pretenden implantar, se desarrollaría en dos fases: una que está ya en exposición pública en el Ministerio, bajo el nombre de La Aldehuela, y una segunda: La Vega. “Esto es un valle, con lo que el impacto paisajístico es limitado. La planta la hemos diseñado para minimizar la distancia con la línea de tensión”, insisten. En la panorámica se ve la línea de alta tensión a la que se engancharía. “No habría ninguna barrera adicional en lo que a líneas de interconexión se refiere”.

El estudio de impacto medioambiental ya está presentado ante el Ministerio para la Transición Ecológica, junto con el proyecto. “Se ha hecho un estudio, una monitorización de avifauna y no afectamos a ningún tipo de nidificación ni ave protegida”. Su propuesta es que parte de los beneficios que obtendrían reviertan en el parque. De hecho proponen una inversión de unos 300.000 euros anuales, lo que supondría incrementar el presupuesto anual de este espacio en un 30%. El año de construcción incluso más. “Son terrenos privados que ahora tienen un uso que no está alineado con los objetivos del parque, que no favorece la proliferación de determinados hábitats que pueden ser beneficiosos para el parque”, argumentan.

Su propuesta pasa por el diálogo con todos los actores sociales que lo han solicitado, presentando “un plan de medidas compensatorias que pensamos que es muy ambicioso. Desarrollaremos acciones en otras zonas del parque para favorecer la proliferación de las aves esteparias. La idea es producir una regeneración de la zona del parque y de su entorno. Al final traeríamos riqueza que se pondría a disposición de la comunidad local y del parque”.

¿La pregunta es por qué aquí? ¿Por qué en el Parque Regional del Sureste? “Porque minimizamos la línea de conexión”. Los promotores de este proyecto arrendarían los terrenos a los propietarios durante 30 años. “Son instalaciones muy sencillas, toda la estructura va hincada, no requiere grandes cimentaciones. Nuestro objetivo es favorecer la entrada de determinadas especies vegetales, como los montes de coscoja. Una de las propuestas que tenemos es favorecer la regeneración de la zona, recuperar la vieja fábrica de  ladrillo, el arco verde”. De las 200 hectáreas que se aprobarían en esta fase, un tercio estaría cubierta por las placas solares. “La idea es poner una barrera de arbolado. Y poner islas, lagunas internas. Los paneles luego están muy separados entre ellos. El impacto visual no es el principal problema”, defienden.

El proyecto tendría una capacidad instalada total de 237,5 MWp y supondrá una inversión estimada de más de 115 millones de euros, permitiendo generar energía renovable de proximidad, equivalente al consumo anual de 138.000 hogares. “Nosotros lo vertemos a la red. Somos productores, no comercializadores”.

De momento, desde la promotora explican el proyecto y escuchan a las asociaciones. “Queremos proponer medidas que tengan sentido y sean del interés de la comunidad local”. Si los plazos se cumplen, en 2023 se podría empezar a materializar.

NO A UNA CENTRAL FOTOVOLTAICA EN UN PARQUE PROTEGIDO

Podemos y Más Madrid Compromiso con Getafe se han posicionado activamente contra esta instalación y han animado a votar en contra en la consulta ciudadana que se puso en marcha para que los vecinos expresaran su opinión. El Ayuntamiento, que no es competente en esta decisión, sí puede presentar alegaciones en la línea de lo que decidan los vecinos. “La transición energética no puede llevarse a cabo mediante la destrucción del medio ambiente”, aseguraba Carlos Enjuto, concejal de Podemos. “No podemos permitir que se ocupen 448 hectáreas de un espacio natural protegido; las instalaciones de energías renovables deben llevarse a cabo, sí, pero no así”, y denuncia que se trata de “una decisión con criterios económicos muy por encima de criterios ecológicos’’.

En la misma línea se pronunciaba Compromiso con Getafe. “Está produciéndose un movimiento especulativo de las empresas del sector eléctrico ya que en Madrid han solicitado la instalación de 21 proyectos que ocuparán una superficie de casi 8.000 hectáreas y con una potencia similar a las renovables subastadas de todo el territorio nacional. Es un movimiento preocupante, pero que además se les permita hacerlo en suelo natural protegido es una agresión ambiental inasumible. ¿Cómo pretenden preservar los enclaves naturales, la biodiversidad, los humedales? Es que es incomprensible. El proyecto que hay en Getafe no es un bosque, es una central fotovoltaica de 460 hectáreas en el Parque Regional del Sureste, un suelo de especial protección, una superficie equivalente a 650 campos de fútbol”, afirmaba el edil Jesús Pérez.