GETAFE/Varios (04/05/2021) – Pese a que tanto la sostenibilidad como el cuidado del medio ambiente son sumamente importantes en la actualidad, lo cierto es que el coronavirus parece haberlas relegado a un segundo plano.
No obstante, y todo sea dicho de paso, el virus logró que hace apenas un año se lograran reducir los índices de contaminación atmosférica a valores insólitos, dejando claro, entre otras cosas, que los millones de desplazamientos que se llevan a cabo en España todos los días emiten buena parte de los gases contaminantes de la atmósfera.
Y es que, mientras otros países europeos llevan años apostando por la movilidad no contaminante, en España no parece haber calado muy hondo esta idea. Esto no significa que el gobierno no lo esté intentando que, por supuesto, lo hace, sino que sus esfuerzos no parecen ser suficientes para convencer a la población.
Basta echar un vistazo a los últimos datos publicados por la Dirección General de Tráfico para darse cuenta de que el parque móvil español es un parque móvil envejecido, tanto, que, más del 20% cuenta con 20 o más años, casi un 25% tienen entre 10 y 14 años, y cerca del 23% tienen hasta 4 años.
Para colmo, la situación vivida durante los últimos meses no ha hecho sino propiciar que las nuevas matriculaciones cayeran en picado mientras que el mercado de segunda mano se incrementaba.
Sin embargo, a la hora de adquirir un vehículo de segunda mano deben tenerse distintas cosas en cuenta, entre ellas, que la transferencia de un vehículo conlleva una serie de trámites y costes asociados más allá del precio convenido.
Todo esto se traduce, normalmente, en la pérdida de al menos una mañana de papeleo en las correspondientes oficinas de Hacienda y Tráfico, además, por supuesto, de los consecuentes desembolsos económicos.
No obstante, el precio de una transferencia de vehículo puede variar mucho dependiendo del lugar donde se lleve a cabo. Otro importante factor que influirá en el precio será si la transferencia la lleva a cabo uno mismo o si, por el contrario, decide contar con los servicios de una gestoría que, aunque pueda incrementar el precio mínimamente, ahorrará tiempo y preocupaciones.
Así que, si estás pensando en adquirir un vehículo de segunda mano y no quieres ocuparte del papeleo, la mejor opción es acudir a una gestoría.