GETAFE/Reportaje (28/11/2020) – “Ya somos 190 personas las que nos hemos organizado en torno a la Plataforma de Afectados por el cierre de la clínica Dentix Getafe aunque todavía hay gente que no se ha enterado”. El 13 de noviembre Dentix cerraba sus clínicas y anunciaba que entraba en concurso de acreedores. “Y de la noche a la mañana nos vimos con los tratamientos a medio hacer y teniendo que continuar con los pagos, ya que muchos de nosotros recurrimos a la financiación para poder arreglarnos la boca”, narra Ana María Puente. “¿Y ahora qué hacemos?”.
Aurora Bárbara Garrido trabaja cara al público. “Desde el pasado mes de junio lo hace “sin los 4 dientes de abajo y dando gracias a que la pandemia ha impuesto la mascarilla como uso obligatorio”. Vecina del Sector III tras visitar varias clínicas se decantó por Dentix. “¡En qué hora!», confiesa. “Hoy estoy sin dientes de abajo porque la prótesis temporal que me pusieron ya no se sujeta, sin ninguna alternativa para completar la colocación de los implantes dentales que me presupuestaron y teniendo que pagar cada mes los 249 euros de un tratamiento que asciende a 7.000 euros”.
Como ella, el matrimonio formado por María del Carmen Arranz y Javier Gil se sienten estafados. “Durante los último meses veníamos notando que cita tras cita no avanzábamos apenas nada. Nos realizaron las extracciones, colocaron los pernios y poco más. La parte más costosa, la colocación de los implantes, nunca llegó”, explican. Alertados a finales de octubre por los rumores de cierre “por insolvencia nos adelantamos y contactamos con el BBVA para ver qué pasaba con el crédito que habíamos firmado con ellos, con la clínica como intermediaria. De los 9.000 euros que financiamos, ya hemos pagado 3.000. Su respuesta fue la de suspender los pagos del crédito durante tres meses hasta ver qué pasaba. Eso nos alertó más si cabe. Pero yo me pregunto: ¿No se tendrían que suspender esos créditos automáticamente a tratarse de la financiación de unos servicios médicos que no nos van a poder prestar?”.
Entre llamada y llamada, María del Carmen y Javier empezaron a informarse y averiguaron que para poder parar los pagos mensuales de ese crédito necesitaban sus historiales médicos. Cuando fueron a la clínica de Getafe, sita en la calle Madrid esquina con la plaza General Palacio, ésta ya había cerrado. “Acudimos a otra de sus clínicas en Villaverde y allí nos pudieron sacar una escueta copia pero a los pocos días ellos también cerraron. A día de hoy andamos consultando abogados para interponer una demanda, no sabemos si individual o colectiva, para intentar que esos créditos se paralicen. Porque el dinero importa, y más si te estafan de esta manera, pero más nos importa nuestra salud y sin dientes no vamos a poder estar mucho tiempo por lo que tendremos que acudir a otra clínica a completar los tratamientos. Un despropósito todo”. Javier tiene claro que “los mecanismos de control han fallado y ahora todos se quieren lavar las manos”.
A Ana María Fuente “la broma” le ha podido costar muy cara. “Inicié con ellos un tratamiento para colocarme implantes. Elegí esta clínica por la cercanía a mi vivienda, somos prácticamente vecinos, y porque siempre veía movimiento de gente y pensé: eso será que lo hacen bien. Hoy me encuentro con que me faltan todos los dientes de abajo que ellos me extrajeron y con una infección provocada por un tornillo que ellos me habían colocado. Tras tomar antibiótico para acabar con la infección y al reiniciar el tratamiento en otra clínica porque así no puedo estar, me informan de que cada tornillo de los que me han colocado es de una forma. Vamos además de una estafa, una chapuza. A día de hoy sigo pagando los 113 euros mensuales de la financiación que realicé para poder arreglarme la boca y claro, con la nueva clínica he tenido que volver a endeudarme”.
Por eso Ana María creó la Plataforma de Afectados por el cierre de la clínica Dentix Getafe. Para denunciar “la indefensión que sufrimos los afectados y para ver si entre todos conseguimos alguna solución a este despropósito. Estamos llamando a todas las puertas: denuncia pública a través de los medios de comunicación, OCU, abogados privados…, porque a Dentix se le ha tragado la tierra y como te puedes imaginar ni siquiera cogen el teléfono. Si hay justicia alguien tiene que poner un poco de cordura en todo esto”. Mientras esa justicia llega “estamos sin dinero y sin dientes”.