GETAFE/Varios (27/02/2020) – A lo largo de nuestra vida, son numerosas las ocasiones en las que sufrimos dolores o molestias en algunas partes de nuestros cuerpos, y cuando decidimos visitar una clínica de fisioterapia nos damos cuenta de que ya es demasiado tarde, y que nuestro dolor se ha convertido en algo crónico, o en una lesión que requiere de tratamiento quirúrgico.
Las razones por las que posponemos nuestra visita a una clínica de fisioterapia son variadas, aunque en muchas ocasiones tienen que ver con nuestro ritmo de vida, que conjuga el estrés con el sedentarismo, una mezcla muy negativa para nuestros músculos y articulaciones. Debemos ser conscientes de que el dolor es una anomalía y que, en ninguna circunstancia debemos acostumbrarnos a vivir con él sin tomar las oportunas medidas para su alivio o prevención.
Visitar una clínica de fisioterapia es la mejor opción para mejorar nuestra calidad de vida, remediar los dolores que estemos sufriendo, y prevenir la aparición de graves problemas de salud a medio y a largo plazo.
A continuación te presentamos las cinco principales razones por las que deberías ponerte en manos de profesionales en una clínica de fisioterapia, al menos una vez al año.
Uno de los principales beneficios de acudir a una clínica de fisioterapia es la prevención de posibles problemas en nuestra anatomía. Un fisioterapeuta te marcará pautas, hábitos y ejercicios que puedes realizar en el transcurso de tu vida cotidiana, de modo que tu organismo pueda optimizarse y puedas mejorar tu calidad de vida.
A consecuencia de los malos hábitos posturales, de los esfuerzos realizados en el día a día o de la falta de movimiento ante diferentes lesiones, nuestro cuerpo acumula tensiones y micro lesiones que pueden llegar a ser muy dolorosas con el tiempo.
Aliviar los dolores y evitar que puedan empeorar es la función fundamental de la fisioterapia.
Acudir a una clínica de fisioterapia para recuperarte de cualquier tipo de lesión, ya sea por accidente o mientras practicas deporte, es esencial. Un fisioterapeuta profesional se encargará de aplicarte el tratamiento más conveniente, adaptándose siempre a tus circunstancias.
El objetivo final de un tratamiento de fisioterapia es lograr la recuperación del paciente mediante la restauración de la fuerza y el movimiento de la zona afectada.
Por ejemplo, ante un esguince de tobillo, un fisioterapeuta profesional buscará la recuperación de su movimiento y el fortalecimiento de los músculos que se hayan debilitado como consecuencia de la lesión, antes que su inmovilización mediante escayola u otros medios, algo que potencia la debilidad muscular.
En ocasiones, las lesiones son fruto de accidentes o de impactos, aunque muchas veces ocurren únicamente por el mal uso que estamos haciendo de nuestro cuerpo, de unos malos hábitos que están dañando, de forma habitual, nuestras articulaciones y músculos. El fisioterapeuta te aconsejará personalmente cómo debes modificar tus hábitos, de forma que evites en un futuro nuevas lesiones y/o recaídas.
En definitiva, una clínica de fisioterapia te ayudará a prevenir, recuperar, valorar y mejorar tu calidad de vida, involucrándote en el cuidado de tu propio cuerpo, con el objeto de mejorar tu calidad de vida.