GETAFE/Sociedad (27/11/2019) – La alcaldesa de Getafe ha trasladado al consejero de Políticas Sociales, Familias, Igualdad y Natalidad, Alberto Reyero, las necesidades que Getafe continúa teniendo en materia de políticas sociales que competen al Gobierno Regional. En el encuentro, en el que también participó la concejala de Bienestar Social, Nieves Sevilla, Sara Hernández volvió a reiterar el problema de la falta de plazas públicas para mayores en Centros de Día y Residencias en Getafe. Esta problemática ha surgido ante la inacción, por parte del anterior Gobierno Regional, que en boca de su exdirector general de Dependencia y Mayor, Carlos González Pereira, se negó a atender esta demanda pese a las más de 6.000 firmas recogidas por las entidades del colectivo de mayores del municipio.
Reyero se ha comprometido a hacer un mapeo de los actuales recursos para posteriormente tratar con más detalle todas las alternativas posibles para que Getafe pueda contar a la mayor brevedad posible con los recursos que los mayores necesitan. Otra de las problemáticas pasa por la mejora de la atención a las personas dependientes, puesto que el retraso por parte de la Comunidad de Madrid en asignar los recursos reconocidos, obliga al Ayuntamiento a prestar el Servicio de Ayuda a Domicilio de muchos vecinos que ya están calificadas como dependientes y cuya atención debería asumir la Comunidad de Madrid. Esta gestión deficiente del gobierno regional está generando una lista de espera que el Ayuntamiento tiene la clara voluntad de eliminar.
Además, se reclamó la necesidad de mejorar la coordinación técnica con los Ayuntamientos, puesto que a pesar de que son los que mejor conocen las necesidades de la ciudadanía, ni siquiera pueden acceder a los datos de solicitudes y demandas de recursos, teniendo que ser la comunicación actual con los técnicos regionales únicamente a través de correo electrónico.
Junto a la mejora de la atención que se presta desde los puntos de encuentro familiar, también se ha trasladado la necesidad de que Getafe cuente con un mayor número de viviendas sociales y de emergencia. Así se podrá atender a las familias que están sufriendo un proceso de desahucio ante el incremento de los precios del alquiler, las situaciones de desamparo que se están produciendo en personas solicitantes de asilo o refugio, así como otras personas en exclusión social. De todas estas cuestiones, el consejero se comprometió a estudiarlo y poder mantener nuevas reuniones específicas en las que ir avanzando en soluciones.