Aunque en esta ocasión no haya demasiada incertidumbre respecto a la elección de alcaldesa, sí estamos inmersos en una dinámica de negociaciones entre el PSOE y el resto de partidos para lubricar apoyos y acuerdos. ¿Afectarán a las relaciones entre las casetas y quienes las trabajan (como ha sucedido en anteriores ocasiones) o el ambiente en general será presidido por el respeto y las ganas de diversión que los vecinos merecen? Todos, políticos, medios, militantes y ciudadanía, necesitamos bajar la tensión un poco y las Fiestas son una estupenda causa.