Todo en su justa medida, también en la educación

GETAFE/Varios (15/02/2019) – En la actualidad, no es extraño escuchar hablar de los nativos digitales, y cierto es que la era digital ha puesto las cosas más sencillas a los más jóvenes y a todos aquellos que han sabido reciclarse, reinventarse y adaptarse a ellas. Sin embargo, muchos de los más mayores del país, han quedado relegados un poco al olvido, sin entender por qué ya no reciben las facturas de luz, gas o teléfono en sus hogares como sucedía antaño. Por desgracia, siempre hay quien más que ver ventajas en las novedades, sufre las consecuencias de los cambios. Son muchos los centros educativos que han incluido los recursos tecnológicos como parte de su metodología, entre ellos el Colegio Malvar, en el que además de conservar lo esencial de la didáctica tradicional introducen estrategias adaptadas a los nuevos tiempos.

Sin embargo, y como en todo en la vida, hay quién ve en la introducción de estas nuevas tecnologías en la educación un arma de doble filo. Por eso, se enumeran a continuación algunas de las ventajas y desventajas más destacables que hacen a docentes partidarios o retractores de su uso en las aulas.

Entre las ventajas más destacables se encuentran:

• Fomentar la creatividad así como ayudar a mejorar la eficiencia y la productividad.

• Facilitar la adaptación a los distintos ritmos de aprendizaje.

• Aumentar el interés de los usuarios.

Sin embargo, los más reticentes se hacen eco de desventajas como el cansancio visual, la falta de actividad física, los problemas posturales y algunos otros que serían fruto de un uso constante sin supervisión.

“Nosotros creemos que las nuevas tecnologías son útiles para los alumnos, siempre con supervisión y en su justa medida. Lo ideal es poder combinar todas las herramientas de las que disponemos para poder ofrecer la mejor educación a los alumnos. En cualquier caso, para nosotros fomentar los principios de vida saludable entre nuestros alumnos es una parte esencial de su educación” indican desde el Colegio Malvar.