GETAFE/Entrevista (28/01/2019) – Acercar el urbanismo al ciudadano, tras la mala fama que había adquirido en los últimos años, era el objetivo con el que Jorge Juan Rodríguez accedió a la Concejalía de Urbanismo: pensando en los ciudadanos y contando con ellos en cada proyecto. Ha sido un aprendizaje acelerado para el edil que se muestra satisfecho con lo conseguido esta legislatura.
No queríamos hacer un urbanismo desligado de la ciudadanía, de la gente; queríamos sobre todo hacer un urbanismo inclusivo: que todo lo que se fuera a hacer, la obra, los recursos fuera a lo que la gente demanda y tal y como la gente quiere.
Sí, aunque siempre se te quedan cosas en el tintero y hay que seguir haciéndolo mejor. Hay que terminar el Polideportivo San Isidro, hay que ampliarlo si así lo estiman los vecinos, hay que finalizar algunos proyectos como el edificio de la calle Madrid, que está todavía empantanado judicialmente.
Al judicializarse y estar pendiente de sentencia judicial ya depende de terceros. Con el Polideportivo San Isidro por ejemplo ha habido que coordinar a un montón de instituciones para que el proyecto salga correcto: Carreteras de la Comunidad de Madrid, Defensa… Estamos orgullosos de que hemos conseguido agilizar esos trámites. Parece que se han dinamitado todos los plazos del polideportivo San Isidro. Se retrasó la redacción del proyecto, que iniciamos en 2017 y el decreto de PIR todavía no estaba vigente, también la existencia de un presupuesto prorrogado… todo esto hace que al final se descuelguen los plazos.
Estamos acabando con la remodelación del polideportivo de La Alhóndiga-Sector 3, una obra muy necesaria: climatización del pabellón y la mejora de las pistas de raquetas. También hicimos el vallado de Juan de la Cierva, el campo de césped, las pistas deportivas tanto de Los Molinos como Perales, en el Giner aparte de la remodelación de Deportes hemos construido el aparcamiento… era necesario darle un fuerte empaque a las instalaciones deportivas, también a las sociales y culturales. La remodelación del centro de asociaciones de Álvaro de Bazán es una obra super agradecida, así como la del antiguo colegio Cervantes que ahora acoge asociaciones educativas.
Nos han entregado el proyecto consensuado con las asociaciones del barrio, y ahora mismo están preparando los pliegos para iniciar la licitación de la obra. Lo importante es que pueda estar a lo largo del próximo curso. Las obras en colegios como los de La Alhóndiga han dado quebraderos de cabeza. Ha sido un aprendizaje en el tema jurídico: es lo que ocurre cuando los precios de una licitación se tiran por el suelo y se permite que piratas entren a jugar en licitaciones públicas. Hay que agradecerle la paciencia a los padres que han sufrido una obra que al final es muy agradecida. La idea siempre ha sido poner el urbanismo al servicio de los vecinos.
Era algo que estaba totalmente perdido y durante esta legislatura hemos sacado cerca de un millón de euros en subvenciones. Había muchas comunidades que no lo ponían porque no podían afrontar el pago: ahora subvencionamos con 9.500 euros o hasta un 25% de la obra. También hemos quitado la tasa de ocupación de vía pública por las rampas. Había que devolver la calle a los vecinos… sin quitar aparcamientos.
Está claro. Con la reforma de Fuerzas Armadas y de Reyes Católicos, por ejemplo, hemos intentado preservar la existencia de aparcamientos: se han legalizado plazas que había en aceras y en Fuerzas Armadas se han conseguido 10 más. También hemos hecho el de la elíptica para dar servicio al Giner de los Ríos, o en el Camino Viejo de Pinto, que es una actuación que ha dignificado mucho una zona que era de botellón. Hemos realizado las mejoras de las cubiertas de los aparcamientos subterráneos y hemos mejorado las plazas que están encima: Pazos Prías, Juan Vergara, plaza de Lanz Ibérica…
Había deficiencias en los colectores y en suministros que tenían que resolverse sí o sí. Eran necesarias. Yo he vivido en San Isidro y a mí siempre me ha preocupado la problemática de que los niños salían justo del cole a la calle: eso lo hemos conseguido solucionar. El espacio que quedaba de acera en Reyes Católicos era inútil o yermo debajo del puente y a todo eso se le da una vuelta y se le busca solución.
En la parcela 1.4 la problemática que hemos tenido es con los suelos contaminados que han aparecido: estan retirando ya los últimos y han comenzado con la toma de muestras. Se tienen que remitir al laboratorio y a partir de ahí emiten el informe y reanudamos obra en cuanto ellos nos digan.
Aquí en el Ayuntamiento no había ningún informe. Nos hemos enterado a posteriori. En todo caso, en cuanto podamos entregar las casas habrá que dirimir responsabilidades y si la Junta de Compensación tiene responsabilidades habrá que reclamarle una indemnización. Pero lo primero es continuar las obras cuanto antes.
Estamos pendientes de retomar la titularidad del inmueble para que sea una parcela de titularidad municipal. Y le hemos llevado a la Comunidad de Madrid un anteproyecto de residencia de mayores aprovechando la edificación existente: el edificio ha envejecido bastante bien porque al tener cubierta, estructuralmente está correcto.
Tenemos que ver qué hacer con ella porque para demoler no está, caerse no se va a caer, así que lo que hay que determinar es qué es lo que quiere la gente que hagamos y si es viable tanto técnica como económicamente.
Me van surgiendo cosas nuevas que quiero hacer como la segunda fase del polideportivo. De lo que más nos nutrimos es de los presupuestos participativos porque la gente te da un montón de ideas que se pueden hacer que a lo mejor son de pequeño calado y que son una herramienta fundamental para un político
Ahora estamos apretando más al Ministerio y los técnicos municipales les están apoyando para la redacción del proyecto intentando sacar el mayor número de accesos para Getafe. Es un proyecto de 20 millones de euros, muy necesario, y que esperamos que antes del final de la próxima legislatura esté.
El desarrollo de Carpetania II porque vertebra a nivel de comunicaciones entre la A-4, la M-50 y la carretera de Toledo, además dando salida a TecnoGetafe, y posibilitando mayor interés por esas zonas industriales. Getafe no tiene tanto suelo industrial como se cree y Carpetania II va a estar hipotecado por los proveedores de Airbus cuando se desarrolle.
Hay que intentar darles una nueva vida: hay que acondicionar los usos del polígono que si antes eran industriales puros y ahora la propia ciudad va demandando sector más terciario hay que pensar en ello. Y abordar una mejora de las infraestructuras de comunicación para poder dignificarlos. La ampliación de la carretera del cementerio es un proyecto ilusionante. Sí, y ha costado más de 2 años y medio de conversaciones con el Ministerio de Defensa. Cada administración tiene su normativa y Defensa es de las más particulares.
El proyecto estaba ya redactado y lo iba a licitar Adif. Les solicitamos que construyeran un paso inferior peatonal y ciclista porque nosotros vamos a construir un aparcamiento al otro lado, en una parcela municipal de más de 200 plazas.
El proyecto está redactado en un sentido único: cambiar a doble sentido implica modificar todos los permisos sobre la M-406 así que hemos decidido que de momento se haga y luego ya se verá cómo cambiarlo. De todas formas, se corre el riesgo de convertir el barrio de Buenasvista en un by pass desde Leganés a la M-50 y eso puede originar mucho tráfico en el barrio.
La Comunidad de Madrid está redactando el proyecto de la rotonda y hay que licitar el proyecto. Van a hacer un túnel peatonal y ciclista por debajo de la rotonda que queríamos que tuviera iluminación natural. La Comunidad lleva cuatro años para esto. El túnel paralelo para suprimir el punto negro ciclista va más adelantado.
Recuerdo el colegio Cervantes que fue un verdadero quebradero de cabeza por como estaba redactado el proyecto, o el propio teatro de la calle de la calle Madrid que casi supuso que Getafe perdiera un millón de euros en subvenciones; el Mercado también fue un verdadero problema; las pistas de Los Molinos también estaban judicializadas, el campo de El Bercial tuvo problemas de humedades y con la pista de rugby…
Los trabajadores son unos profesionales como la copa de un pino. En todo momento les he dicho que la confianza que el Gobierno tenía depositada en ellos no tenía nada que ver con la entrada de la Policía aquí: seguimos confiando en ellos. En cuanto al tema judicial hay muchos trabajadores que para ellos no es plato de buen gusto, pero se han repuesto y si cabe desempeñan mejor su labor porque le ponen más cuidado y más empeño. No hay reticencias de la gente y ni se han paralizado las cosas.