Conoce Portugal y Galicia a través del Camino Portugués

GETAFE/Varios (10/12/2018) – Todo el mundo desea viajar y conocer mundo, pero si a esta experiencia se le suma una aventura mochilera, el resultado es una vivencia única e inigualable para el resto de tus días.

Todo el mundo siente la necesidad imperiosa de conocer mundo, ver otras culturas y por supuesto pero no menos importante probar su gastronomía típica, pues esta es la única forma de poder decir que realmente has viajado a un lugar distinto a tu país natal y lo has conocido a fondo.

En este caso, Portugal es un país que está al lado de España y gracias a ello las posibilidad de visitarlo son innumerables, se puede ir desde en coche hasta en tren, pero lo que muchas personas no conocen es que pueden realizar el Camino de Santiago mediante el Camino Portugués, haciendo el peregrinaje en Portugal y Galicia. Sin duda alguna es una forma muy peculiar para viajar fuera de tu país de origen y realizar una actividad de lo más aventurera.

Para saber más acerca de las posibilidades que hay acerca de los distintos caminos existentes para hacer el Camino de Santiago se puede visitar la siguiente página web, https://santiagoways.com/camino-de-santiago/camino-portugues/. La página web de “santiagoways” está especializada en el Camino de Santiago, esto hace que cualquier persona al entrar podrá resolver sus dudas fácilmente, además ofrecen ayuda para los peregrinos durante su trayecto, lo cual es sumamente importante a la hora de realizar este tipo de aventuras.

¿Qué lugares atraviesa el recorrido del Camino Portugués?

El Camino Portugués original tiene su punto de inicio en Lisboa (Portugal) y el final en Santiago de Compostela como el resto de opciones. La cantidad de kilómetros necesarios a realizar para completar esta aventura son un total de 620, los cuales se realizarán a lo largo de 25 etapas.

¿Qué es una etapa?

En el Camino de Santiago las etapas corresponden a los días necesarios para realizar el trayecto completo, desde su inicio hasta el fin en Santiago de Compostela, es decir, un día corresponde a una etapa. Además cada etapa se compone en general por unos 25 kilómetros recorridos a lo largo de todo el día o etapa, ya que no se aconseja andar más de esa distancia para evitar lesiones y problemas que puedan entorpecer etapas posteriores.

El inicio oficial de éste camino es Lisboa pero existen otras alternativas de inicio, estos puntos distintos para empezar el trayecto están situados en los lugares que se van atravesando a lo largo de las etapas, es decir se podrá iniciar la aventura en Santarém, Leiria, Coimbra, Oporto, Braga y Viana do Castelo en Portugal y en España Pontevedra, A Coruña. En este caso el peregrino deberá elegir el punto de inicio que mejor se acople a sus necesidades físicas y obviamente de tiempo disponible.

Una característica a destacar  es la baja o nula dificultad que tiene el Camino Portugués, esto es debido a la escasez de desniveles positivos que hay en las zonas a recorrer por el peregrino, los cuales pueden llegar en el peor de los casos a los 500 metros de desnivel positivo. Este es uno de los motivos principales por los que muchas personas eligen este tramo para hacer el Camino de Santiago, debido a la poco exigencia física que requiere a diferencia del Camino Francés el cual es muy temido por los peregrinos ya que cuenta con etapas que tienen desniveles positivos de hasta 3000 metros. También podría decirse que es una buena opción para iniciarse en el Camino de Santiago, lo cierto es que hay muchas personas indecisas que tienen miedo a fracasar estrepitosamente por tener muy poco fondo físico, en este caso es una buena opción para introducirse en el mundo del peregrinaje, incluso llegaría a ser recomendable para personas mayores sin ningún problema.

Para terminar hay que matizar en el detalle de las infraestructuras, pues en este caso, el Camino Portugués no es de los mejores, por lo que a veces no hay gran número de albergues disponibles para los peregrinos, en este caso es recomendable realizar el Camino Portugués en una época en la cual los albergues estén todos abiertos, para evitar en medida de lo posible tener problemas a la hora del hospedaje. De todas formas, si sólo se dispone de días libres para hacer este recorrido en invierno u otoño, lo mejor sería hacer una planificación excepcional para asegurarnos de esta forma que no hay ningún imprevisto con los albergues.