GETAFE/La piedra de Sísifo (02/10/2018) – Siempre he creído, y defendido, que lo hacíamos al revés. Trabajamos once meses (quien trabaje, claro) y descansamos uno (quien descanse, por supuesto); pero lo verdaderamente interesante sería descansar once y trabajar uno (para pedir no hay que ser miserable). Por mi parte, desde que escribí a mediados de julio, me he tomado un descanso de dos meses y medio pero Raquel, la directora, se ha dado cuenta y me ha preguntado si estaba secuestrado y cuánto rescate pedían. Muy sarcástica ella.
Con la pereza propia de la vuelta al cole, observo que la vida sigue igual: Colegios de construcción eterna, obras de adecentamiento que trascienden el edificio a adecentar, festivales 3 en 1, unidades policiales que desaparecen para volver corregidas y aumentadas, las sempiternas quejas de limpieza (que se agudizan con la cercanía de elecciones), Días Internacionales de, para, por, según, sin, so, sobre, tras; reivindicaciones vacías y silencios llenos, candidatos lanzados unos y otros con freno y marcha atrás, carreteras que quieren ser calles y calles que quieren ser carreteras (con petición de radares y todo), Comunidad y Ayuntamiento dándose cera y vecinos cabreados con ambos. Y dolor, mucho dolor expectorado cada mañana, a eso de las 12, en la plaza del ayuntamiento por culpa de monstruos, terroristas y subhumanos crueles, que disponen de vidas humanas con modos criminales, terribles y desalmados.
Arrancamos unos meses apasionantes que culminarán el próximo 26 de mayo en nuestra puntual cita con las urnas. Solo deseo que unos y otros dediquen sus esfuerzos a proponer mejoras en la vida de los getafenses y no a darse latigazos en nuestra espalda. Deseo una campaña de juego limpio, aunque no la espero.
Esforcémonos en hacer más fácil la vida a quienes tengamos alrededor y que ellos lo hagan con nosotros. Al fin y al cabo, qué es la vida sino un montón desordenado de hojas arrancadas del calendario que miramos sorprendidos de todo el tiempo transcurrido y preguntándonos cómo ha sido posible, si no nos hemos dado cuenta. Desde esta breve “Vuelta al cole”, sed felices.