GETAFE/Miradas arcoíris (11/10/2018) – En estos días las personas LGBT hemos recibido una noticia maravillosa: la ciudadanía rumana dio la espalda este fin de semana al referéndum que planteaba vetar constitucionalmente los matrimonios entre personas del mismo sexo. La consulta no alcanzó el 30% de participación necesaria para ser válida, y teniendo el 20,4% no alcanzó el umbral necesario, aun facilitando el gobierno de manera excepcional dos días de jornada electoral.
Las asociaciones por los derechos humanos así como personas LGBT y activistas llamaron a boicotear las jornadas y no acudir a votar una propuesta que planteaba modificar la Constitución para cambiar la definición de matrimonio ajustándolo a la idea de unión entre hombre y mujer.
Pero no lo han conseguido. La campaña de odio que han realizado en este país no ha conseguido sacar adelante una propuesta totalmente retrógrada y lgbtfóbica, gracias entre otras a la lucha de nuestros compañeros y compañeras activistas rumanos. Nos puede parecer una lucha ajena a nosotras, y pensar que está lejos de poder llegar a darse en un país como el nuestro, pero nada más lejos de la realidad. Estamos viendo un auge en nuestro país de movimientos políticos que apuestan por destruir la sociedad democrática y diversa que con tanto esfuerzo hemos conseguido, para volver a imponer sus valores “conservadores” sin tener en cuenta los derechos humanos y la legislación que nos ampara.
Por eso, es importante que en tiempos en los que quieren dividir nuestra lucha, nos mantengamos unidos, sobre todo en un municipio como el nuestro, Getafe, que siempre se ha caracterizado por ser ejemplo de solidaridad, diversidad y respeto. Tenemos que seguir poniendo en valor nuestros principios como pueblo, seguir luchando por la igualdad como hemos venido haciendo hasta la fecha y enarbolar nuestra bandera de la diversidad en todos los aspectos para demostrar que, como en Rumanía, la intolerancia no tiene cabida ni en nuestro país ni en nuestro municipio.