GETAFE/Look total (20/07/2018) – Si quieres sobrevivir a las bodas y eventos veraniegos, es importante tener en cuenta el dress code lo mismo que el parte meteorológico a la hora de elegir qué ponerse. La hora del día suele marcar el largo del vestido, lo mismo que la etiqueta indicada por los novios en la invitación. Beauty look, kit de emergencia, zapatos, dress code… ¿Sabes cómo sobrevivir a una boda summer?
Dependiendo de a quién preguntes, esta época puede inspirarle una inmensa alegría o un temor importante. Por un lado las bodas son divertidas, son una gran fiesta, son románticas y son la excusa perfecta para pasar un fin de semana de amigos. Por el otro lado están los gastos que implican, el qué regalar, la organización de la despedida… y esas tres palabras mágicas: qué-me-pongo.
Sí, lo que llevamos también condiciona nuestro estado de ánimo.
Más allá del cumplimiento del protocolo, recuerda que es imprescindible ceñirte a tu morfología. Puede que ya apliques algunos tips básicos en tu vida diaria, las bodas no son excusa para no hacerlo. Si eres bajita, prescinde de los zapatos planos. Aunque te encanten las bailarinas, no es el zapato que mejor te quedará. Si tienes caderas anchas, elige vestidos amplios, que marquen la cintura y fluidos para no incidir en esta zona. Ya lo sabes, los monos o pantalones ceñidos no son recomendables. Eso sí, los vestidos de cóctel o «paraguas» serán tus mejores opciones para destacar.
Guíate por el protocolo básico: para bodas diurnas, lo indicado es un modelo corto, y es para enlaces de tarde/noche cuando puedes apostar por uno largo.
Color blanco no…pero off white sí. Los colores claros reflejan la luz de sol en lugar de absorberla, y de ahí que el blanco sea uno de los colores más populares en verano. Si no quieres “competir” con la novia y su vestido, prueba con combinaciones en dos colores, por ejemplo con pantalones blancos ligeros, o incluso cropped o kick flate, con un top en un color brillante como el verde o el azul, asimétrico con un hombro al descubierto. También valen los estampados con mezcla de blanco, los diseños off-white como un café o un crema. Opta por vestidos ligeros y frescos, en tejidos naturales que no se peguen a la piel. Tampoco escojas el negro, a no ser que te atrevas con unos complementos muy coloridos.
Las primeras protegen del sol y dan algo de sombra al rostro, dependiendo del tamaño del ala, pero solamente puedes llevarlas en las bodas de día y hay que quitárselas una vez te sientes a comer, ya que solamente pueden llevarse durante la ceremonia (y a menudo hay que quitárselas para no tapar la vista a otros invitados), y durante la recepción. Aunque a primera vista parezcan una buena opción, una pamela que no sea de un material natural y transpirable puede arruinar un peinado combinada con el calor (además del hecho de que tendrás que llevar el pelo suelto o a lo sumo con una coleta, y olvidarte de recogidos fresquitos), y acabar convirtiéndose más una molestia que un accesorio útil. ¡Cuidado!
En un principio los tocados estaban relegados a las bodas de tarde/noche y las pamelas eran las reinas del día, hace tiempo que los primeros han ido ganando terreno en los enlaces diurnos.
Mensaje unánime: pedrerías, lentejuelas y demás adornos y aplicaciones brillantes son totalmente incompatibles con las bodas diurnas; y no solo en vestidos, también en complementos y zapatos. En una boda, sea a la hora que sea, lo ideal siempre es apostar por la discreción y la elegancia, así que elige joyas, piezas de bisutería y accesorios sencillos.
No, a una boda no es obligatorio ir con vestido. De hecho, los monos y los pantalones han ido haciéndose poco a poco un hueco importante en los looks de las invitadas. Otra opción es un traje de chaqueta, aunque corres el peligro de que te sume años, ya que añade inmediatamente seriedad a quien lo luce.
Lo que durante años fue considerado como una máxima del buen gusto se ha quedado totalmente obsoleto, tanto en bodas como en tus looks de diario. Los complementos, sea cual sea, te permiten jugar para resaltar tu look y afianzar tu personalidad, así que atrévete a innovar y mezclar (siempre con gusto, eso sí).
Por supuesto, no te dejes las gafas de sol en casa. Unas buenas gafas pueden vestir tanto como un tocado, un clutch o unos zapatos, y las echarás en falta si te las dejas en casa y la ceremonia es al aire libre. Elige unas con una montura metálica si llevas un vestido estampado o con un color muy vistoso, o de pasta con un marco “retro” si quieres añadir un toque de color.
¿Quién dice que no? Es un lujo que muy pocas, por altura, se pueden permitir, pero no lo descartes nunca. Antes de ir con un tacón de altura imposible que no te permita ni caminar, mejor la opción plana.
Sandalias todoterreno. Si a estas alturas las sandalias planas son aptas para la novia, también lo son para sus invitadas, aunque hay que tener cuidado a la hora elegir modelo. Unas sandalias planas, abiertas, con adornos de joyería, pueden funcionar con un vestido largo, y unas tipo gladiadoras con un traje corto corto, intentando evitar los diseños muy casuales o deportivos. Otros zapatos veraniegos que puedes llevar sin problemas: las alpargatas de diseño, con cuña o flatforms, con acabados metalizados, abiertas en el talón o la puntera, y en materiales súper naturales, como el yute y la loneta. Si la boda es de playa o en un jardín, los novios ya han decidido por ti: di adiós definitivamente a los tacones si no quieres pasarte el día hundiéndote en la arena o el césped.
Muchas mujeres piensan que una boda es una fiesta de disfraces, cuando no es así. Este tipo de eventos no son el momento de probar estilos nuevos, ni de innovar.
Maquillaje líquido, no gracias. Igual que para las novias el maquillaje waterproof es poco menos que obligatorio, para las invitadas veraniegas el maquillaje líquido está prácticamente prohibido, a fin de evitar pasarse el día retocando bases, sombras y eyeliner en el lavabo. Apuesta desde primera hora por el maquillaje en polvo y de larga duración, que resista todas las horas que vas a pasar de pie o andando bajo el sol de un sitio para otro.
9. ¿Y si la boda es civil?
El plus de este tipo de enlaces es que te permitirán reciclar las prendas y complementos de tu look en tu día a día, ya que (generalmente) presentan un protocolo más relajado. Eso sí, hay que huir de estridencias, brillos o minifaldas, como en cualquier otra ocasión.
10. ¿Qué es lo más adecuado para bautizos y comuniones?
Tenemos que tener muy claro que tanto los bautizos como las comuniones siempre se celebran por el día o a primera hora de la tarde. Por lo tanto, el corte, tejido, largo del vestido y el estilo del look tiene que ir acorde con ello:
Añade “extras” summer a tu kit de supervivencia beauty. La barra de labios, el rímel por si se cae alguna lagrimita… y una hidratante con factor de protección solar en tamaño viaje, toallitas antibrillos para matificar la piel, polvos compactos, desodorante, un lazo para hacerte una coleta con lazo si el calor aprieta, un abanico y una pequeña botella de agua…
Felices vacaciones y feliz verano. ¡HASTA PRONTO!
[…y siempre, siempre, siempre diviértete combinando]
“Olvida las reglas, si te gusta, úsalo”