GETAFE/El rincón del lector (27/11/2017) – Hoy, día 27 de noviembre, día del Maestro, se ha celebrado en el Ayuntamiento un Pleno extraordinario. Y ha sido extraordinario no sólo porque así lo determina la normativa, sino porque ha servido para que se despidiera de su puesto de concejal Álvaro Gómez que ha desempeñado, desde que el PSOE se hiciera cargo de la Alcaldía, allá por junio de 2015 (¡tan cerca, tan lejos!), las delegaciones de Educación y Servicios Sociales. Álvaro, al que considero amigo y que espero que él también me tenga por amigo, vuelve, a partir de ahora, a su actividad vocacional, la de educar.
El resto de los concejales, mediante los portavoces de los diferentes grupos, le han despedido todos con respeto, con palabras elogiosas, ajustadas y, en general, agradecidas. El portavoz de su grupo, Herminio Vico, ha ido más allá con una intervención muy trabajada demostrándole, claramente, su afecto. También Sara Hernández, la alcaldesa, ha hecho una intervención muy corta porque la emoción le impedía, en algún momento, expresarse.
Después de esas intervenciones el propio Álvaro se ha despedido leyendo la nota por la que se comunicaba su decisión y que se ha publicado hace unos días, pero añadiendo referencias emotivas de agradecimiento dedicadas a sus compañeros y, sobre todo, a su familia.
Finalmente, se le ha dedicado a Álvaro un largo aplauso con todo el público asistente puesto en pie. Entre los concejales no ha habido unanimidad: en la bancada de Ahora Getafe la señora Calcerrada ha dudado pero, poco después, se ha levantado; más le ha costado al señor Pinillos que ha permanecido sentado casi hasta el final, levantándose, por fin, como si le obligaran. Quien, aunque ha aplaudido, no se ha levantado en todo el tiempo ha sido la concejala no adscrita, Mónica Cerdá.
Estoy absolutamente seguro de que todos, también el señor Pinillos y la señora Cerdá, conocen el valor de los símbolos, por eso estoy convencido que su manera de actuar no ha sido casual sino que, por el contrario, ha respondido a su deseo de expresar algo. A mí me gustaría que explicaran públicamente, es decir a toda la ciudadanía de Getafe, la razón por la que han considerado necesario expresar, de manera ostensible, ese rechazo hacia Álvaro. En mi opinión, las discrepancias políticas no lo justifican suficientemente.
He de decir que, para mí, ha sido una sorpresa porque sé que Álvaro seguramente tiene adversarios políticos, pero nunca pensé que pudiera tener enemigos; su forma de ser y de comportarse, tanto en lo personal como en lo político, es la de una rara avis, la de esas escasísimas personas que buscan el acuerdo, que no pelean por destacar o quitarle el protagonismo a nadie, que creen en el valor del diálogo y lo practican en toda ocasión.
Por eso, desde la indignación y la tristeza, mi rechazo a esas actitudes tan poco amables y corteses (intento ser educado, por eso no empleo otras palabras más fuertes que creo merecerían); y mi homenaje a quien ha dedicado un tiempo de su vida a su ciudad, con esfuerzo, con generosidad y con un trabajo muy bien hecho. Gracias Álvaro.
rUFO
27 noviembre, 2017 at 22:59
Que bien Calvete,
Pues más que disparar contra Cerdá y Pinillos deberías dirigir tus despechos al equipo de gobierno municipal. Pasas por encima, como sin querer, con la crítica hacia los poderes superiores, y vuelcas tus desprecios hacia dos personas por una mera cuestión de forma.
Seguro que ni Mónica ni Dani tienen nada que ver con su dimisión. Si tanto quieres a Álvaro, bien deberías dirigir tus críticas de FORMA DIRECTA hacia alcaldía.
Así los quiere Sara.