Una historia viral de una cafetería de Getafe

Foto: Juan Soto Ivars

GETAFE/Sociedad (25/10/2017) – El Trébol es una cafetería modesta, en la calle Depósitos, muy cerca de la Universidad Carlos III. Pero se ha convertido en la protagonista de una historia que se ha hecho viral en Facebook y que ha puesto sobre la mesa el periodista y escritor Juan Soto Ivars y que ya han compartido más de 5.000 personas. Una cafetería «en Getafe, una ciudad sin encanto». Por aquel entonces, Soto Ivars estudiaba periodismo en la Carlos III. «Yo era un mal estudiante, desmotivadísimo. Me gustaba más jugar a periodista, así que me apunté a una revista, el Proyecto Ícaro, que había montado un estudiante mayor que yo«, cuenta en su relato. «Cuando este estudiante acabó la carrera me hice cargo de esa revista. Había quedado un remanente de una beca, pero no lo suficiente para sacar el siguiente número. Faltaban 100 euros. Así que me fui a buscar publicidad».

El relato continúa con una suerte de frustración buscando publicidad y «cosechando muchas negativas. Yo les vendía una moto. Se imprimían 1.000 ejemplares de la revista y las repartía yo por la universidad, pero les contaba a los anunciantes potenciales que los estudiantes acudirían en manada. Me había preparado un discurso totalmente desesperado. Nadie me hacía el menor caso».

Y ahí entra en escena El Trébol. «Entré a este bar en el año 2007. Estaba cansado y fastidiado. Por dentro, El Trébol es muy modesto. El dueño se parecía mucho al hombre que hay detrás de la barra del bar normal en el que estáis pensando. Le solté el rollo y me interrumpió: -¿Cuánto necesitas?».  La suerte iba a cambiar para el futuro de la revista. «Le dije que había anuncios de 20, de 15, de 30, según página y tamaño. Me repitió la pregunta y le dije que me faltaban 100. Me los dio. No le importó el anuncio. Toma, chaval, saca tu revista».

Incluso se sintió un poco ofendido por ser tratado como a un crío («lo era», confiesa ahora). Pero la revista salió gracias a ese hombre. Y hoy que es un reputado periodista quiere devolverle el favor. «Esta historia es un anuncio de un bar, El Trébol de Getafe, cuyo dueño es una buena persona que ayudó a un estudiante ilusionado con su revista. El otro día fui a la ciudad, al festival Getafe Negro que organiza Lorenzo Silva. Después de la charla me metí al Trébol, tomé una cerveza a solas, vi al dueño, me emocioné un poco, pero no le dije nada. Solo hice esta foto de mierda«.

Y hace una petición: «Si vais a Getafe tomad una cerveza en El Trébol. Parece un bar normal y corriente pero es diferente. Siempre me he preguntado cómo hubiera sido mi vida sin esta experiencia, porque la vida se endereza o se tuerce con los giros más pequeños».