Nada nuevo bajo LYMA

GETAFE/Asiento en el Pleno (11/10/2017) – A priori el de hoy era un Pleno interesante. Ángel Muñoz, concejal de LYMA, iba a dar explicaciones, a responder a las preguntas de la oposición sobre el tema de los despidos en la empresa pública. Partido de alto riesgo. Pero no, no se jugó a puerta cerrada (casi, casi)… se optó por ponerlo a las 8.30 de la mañana. Hora en la que para el PP «no ha salido el sol». Que ya sabemos que muy acostumbrados a madrugar no parece que estén, pero ponerlo en una nota de prensa… Y oye, esta vez Soler llegó puntual… y se marchó puntualmente pasado el ratito reglamentario para ‘ganarse’ los 285 euros. ¡A la buchaca!

Y me estoy desviando del tema, pero es que el interesantísimo Pleno resultó… un auténtico bodrio. Todo estaba preparado para enfrentarse a un posible golpe al Pleno, con sitios ocupados por cargos de confianza y con la alcaldesa/presidenta Sara Hernández sacando el látigo para que los corderos no se salieran del redil. Un aviso, dos avisos, ¡a la calle! Un vecino fue ‘invitado’ a abandonar el salón, el primero (creo que no me equivoco) que es expulsado esta legislatura y eso que razones más contundentes que esta ha habido. Y ahí acabó el fallido golpe. Porque los despedidos de LYMA; esos que se esperaba que estuvieran presentes para hacerle pasar un mal trago al concejal, se borraron de este Pleno.

Del resto, poco más hay que hablar. Lo ya sabido. Preguntas: algunas oportunas, otras menos; algunas incómodas y otras claramente pactadas. Y respuestas: nada fuera del guión. Lo que incomoda o excede, «diríjase a LYMA a solicitar esa información» (como si respondiese). Daba igual la pregunta: el guión es el guión. Y lo que está judicializado no se trata aquí. La única novedad, que repitió el edil en varias ocasiones, es que cargó la responsabilidad de la decisión de los despidos en el gerente de la empresa y la asesoría jurídica. Ellos fueron los que consideraron que el expediente abierto tenía que acabar en la máxima sanción: el despido. «La sanción es proporcional a los hechos, por la transgresión de la buena fe contractual. Independientemente del valor económico, el despido es procedente», citó la alcaldesa al cierre de la sesión y citando una de las sentencias favorables a la empresa. Una hora y cuarenta y cinco minutos. Nada nuevo bajo LYMA.