GETAFE/Palabra de concejal (10/07/2017) – Tras la finalización de las fiestas del barrio de Juan de la Cierva, la asociación de vecinos Aires Nuevos lanzó a la opinión pública un comunicado en el que expresaba sus quejas acerca del escaso apoyo económico y humano que han recibido los vecinos y las vecinas así como las asociaciones del barrio, por parte del gobierno municipal, para la realización de las diferentes actividades que se realizaron durante las fiestas.
La falta de apoyos se concretaba en términos económicos en una asignación congelada de 3.000 euros desde el año 2005 para un barrio que cuenta con más de 29000 habitantes (cifras actualizadas a fecha de octubre de 2016). No hay que ser un matemático importante para echar cálculos acerca de a cuánto tocamos por vecina y vecino: aproximadamente 0,1 euros.
Efectivamente como reza el título de este artículo el pan para los chorizos y para la huevada tuvo que comprarlo la asociación de vecinos Aires Nuevos, no con la subvención que recibe pues carece de tal cosa, sino de sus propios bolsillos, tal es el compromiso con este barrio y con el municipio entero así como de otras asociaciones y vecinos y vecinas que mantienen vivo el tejido social del barrio. Ni tan siquiera las migas se pudieron hacer, por parte del grupo de mayores, por no disponer de presupuesto para tan solo 80 euros.
No solo no ha habido apoyo económico sino tampoco logístico: no se ha podido realizar la actuación de la Escuela Municipal de Música Maestro Gombau por no contemplar otro espacio que no fuese la calle. No se ha proporcionado una carpa para los alimentos ni para el personal y ni siquiera se han tomado las actas de la comisión de fiestas. Todo un ejemplo de colaboración.
En Ahora Getafe pensamos que los barrios son la estructura nuclear de nuestro municipio y las fiestas de los mismos un instrumento a través del cual no solo nos divertimos y creamos espacio para la crítica y la reivindicación, sino que también generamos comunidad y cohesión entre los vecinos y las vecinas. Unas fiestas en las que el diseño lo deciden sus vecinos y en las que el ayuntamiento se pone al servicio de los mismos puesto es su papel ser garante de los derechos y deberes de sus ciudadanos y ciudadanas.
La promoción de Getafe como ciudad de festivales da un prestigio a la ciudad que sería beneficioso para todos y para todas si no fuera porque se trata esta pretensión como excluyente de unas fiestas de barrio dignas, y de la promoción de grupos noveles locales a los que se les insta a tocar gratis no dando valor ni facilitando la visibilización de estos grupos que no estaría mal que tuvieran el apoyo de su ayuntamiento.
El pez grande se come al pequeño y las instituciones están precisamente para corregir estas tendencias y no para perpetuarlas. Desearíamos que la alcaldesa Sara Hernández y su equipo de gobierno se hicieran eco de las asociaciones y de los vecinos y vecinas, y dieran todo el apoyo tanto económico como logístico y humano para que todos los barrios tuvieran las fiestas que por derecho se merecen.
Monica Maroto Rodriguez
10 julio, 2017 at 11:25
Tiene razon la concejala Ana Isabel, mis abuelos que viven en el barrio, ni pudieron acceder a la comida de las migas con otros mayores, por una simple ayuda de 80 € y luego la alcaldesa hace que paguemos a sus asesores municipales cifras de cinco ceros y privilegios (parking gratis, dietas). No se como Ahora Getafe siguen siendo sus vasallos en el Ayuntamiento