GETAFE/La voz de la experiencia (27/04/2017) – Tal y como se están desarrollando los acontecimientos políticos, no es de extrañar el aumento de la desconfianza en la ciudadanía, provocando un mayor individualismo en casi todos los órdenes de la vida, y así, ante este panorama, es donde hacen su “agosto” los nacionalismos más rancios y los independentismos estrechos de miras.
Ante los comportamientos políticos de dos grandes países, como son Rusia y Estados Unidos de Norteamérica, el Brexit Inglés, las últimas elecciones en Francia, pero sobre todo, a nivel español, la constatación, día sí día no, de tantos sinvergüenzas desalmados dedicados a las trampas políticas-económicas, en total oposición a lo que deberían y para lo que fueron votados, así llevamos demasiado tiempo con casos tan sonados como, el 3% de Convergencia de Cataluña, los ERES de Andalucía, el saqueo valenciano, la Caja ‘B’ del Partido Popular, los cientos de ‘mangoneos’ del PP madrileño y otros muchos casos por distintos puntos de nuestra geografía: vamos que hay razones como para echarse a llorar.
Mucha gente opina que este mundo está manejado por un pequeño grupo muy poderoso económicamente, pero no parece que éstos hayan diseñado estas derivas tan complejas, que finalmente potencien a belicistas, como parecen ser Putin o Trump, y mucho menos la retahíla española de chorizos, malversadores, prevaricadores, independentistas por motivos oscuros y chusma de todo tipo.
Está claro que estos comportamientos nos han hecho más individualistas, sembrando en toda España la desconfianza, y esto, queridos lectores, es lo peor que nos puede ocurrir como pueblo. No podemos permitirnos el retroceso imponiendo de nuevo fronteras, limitando el conocimiento y el desarrollo, mirándonos el ombligo, erigiendo nuevas murallas tecnológicas, fomentando viejos y nuevos racismos, enfrentando religiones etc.
Necesitamos ganar de nuevo la confianza en la política, y esto lo conseguiremos si somos intolerantes con todos los corruptos. Si como dijo un viejo político “eligiendo a los mejores y persiguiéndolos como si fueran los peores” no crean ustedes, a menos a primera vista, en los salva patrias, son como los charlatanes, que nos encandilan con el ungüento amarillo.
Para tener futuro tenemos que ser muy serios y muy constantes, fortaleciendo las instituciones, estableciendo unos parámetros de redistribución y corresponsabilidad que permitan a todos, una vida digna, fomentando la educación en todos los niveles, la investigación, el derecho a la salud.
Todo esto solo se puede hacer con una política adecuada y con unos políticos capaces, trabajadores y honrados, y desde luego, sabiendo que no todos son iguales.
jose valentin ramirez
29 abril, 2017 at 10:00
Muy acertado Luis, aunque incluir los nacionalismos o independentismo como algo negativo en sí no lo comparto. Es verdad que hay quien se aprovecha de esos sentimientos para su propio 3%.
Salud
Luis Muela Almodóvar
29 abril, 2017 at 20:07
Hola Valentin, Saludos;
En este caso, me estoy refiriendo a los «Rancios y estrechos de miras», pero de cualquier forma soy mas de tender puentes que de levantar fronteras.