El pasado 9 de mayo, a las 19 horas, un agente cuyo nombre corresponde a las iniciales D. R. C, destinado en la Jefatura Superior de Policía de Madrid, se encontraba junto a su mujer y su hija menor realizando unas compras en el centro comercial Getafe 3.
Todo comenzó cuando una banda, formada por 4 varones de mediana edad y de origen sudamericano, entró en un establecimiento de joyería. Cada individuo tenía su función bien determinada, mientras uno entretenía a la dependienta pidiéndole información sobre diferentes productos, otros vigilaban el exterior del local, y un cuarto se introducía tras los mostradores para sustraer los artículos de joyería.
Pero ese día las cosas no sucedieron como ellos esperaban, y es que en el exterior del local se encontraba un oficial de la Policía Nacional, que al oír gritos procedentes del interior de la relojería y observar a continuación como un individuo salía la carrera, no lo dudó un instante, a pesar de encontrarse franco de servicio y en compañía de su familia, salió en persecución de esta persona, identificándose como policía, consiguiendo darle alcance, y tras un leve forcejeo recuperar la manta con la totalidad de los artículos que portaba.
Por suerte, no hay que lamentar heridos, y se pudo recuperar los objetos del robo, si bien los tres ladrones restantes consiguieron escapar, la policía ya realiza investigaciones para dar con el paradero de estas personas.