Los tumores complejos de mediastino, una región del tórax donde se localizan con frecuencia tumores que para su operación requieren incisiones muy amplias que ocasionan generalmente importantes secuelas y una lenta recuperación del paciente, se podrán operar con una cirugía mínimamente invasiva asistida por un sistema de visión toracoscópica. Esta es la última novedad que ha implantado el Hospital Universitario de Getafe con el objetivo de mejorar y agilizar la recuperación de los pacientes.
Mediante este nuevo abordaje se realizan 3 mínimas incisiones a través de las que trabajan los cirujanos torácicos, ayudados de una óptica y un monitor de visión toracoscópica. El nuevo procedimiento permite una mejor visión espacial de las estructuras anatómicas por la tecnología utilizada, con amplificación de la imagen y la posibilidad de explorar toda la cavidad torácica, incluso aquellos lugares que tradicionalmente eran considerados como «ciegos» en la cirugía abierta.
Esta técnica mínimamente invasiva tiene como ventajas un menor dolor postoperatorio y a largo plazo, una mayor recuperación funcional, menor daño inmunológico, menor índice de complicaciones quirúrgicas y mejor resultado estético. Todo ello permite una más pronta recuperación del paciente, que puede recibir el alta hospitalaria a los 2 ó 3 días de ser operado.
El Servicio de Cirugía Torácica también ha implantado recientemente la cirugía mínimamente invasiva en otras patologías como el neumotórax y algunos casos de cáncer de pulmón en estadios iniciales (lobectomías), dentro de su estrategia para ampliar este tipo de cirugía por sus ventajas en la recuperación del paciente.