Las muecas de los días es el último libro de Juan Manuel Alcalá: una obra en busca de mecenas para publicarla. Cualquiera puede hacer su aportación a través de Verkami y colaborar para que esta historia novelada vea la luz. Se ambienta en Asturias y Getafe y su protagonista, el periodista Luis de Sirval se sitúa en los sucesos de la revolución de Asturias en 1934, y en los previos a la Semana Santa de 1923, en Getafe. El objetivo del proyecto está fijado en 1.800 euros para la impresión, diseño de portada,
ISBN, diseño editorial, maquetación digital y pago de las recompensas ofrecidas a los patrocinadores que pueden optar por apoyar el proyecto. Las aportaciones pueden ir desde los 15 a los 450 euros.
Con esta historia Alcalá busca además, «recuperar la figura de un mito del periodismo patrio muerto en los prolegómenos, manipulado durante la contienda, y olvidado tras la última de las guerras civiles que han asolado España».
En octubre del 1934, el periodista Luis de Sirval viajó a Oviedo para escribir una serie de artículos sobre la ya fallida revolución de Asturias. A punto de escribir su tercer reportaje, fue detenido por agentes del Cuerpo de Vigilancia y asesinado en la Comisaría por tres oficiales del Ejército republicano ‘de ocupación’. Los disparos que recibe le nublan la vista y, antes de morir, revive los sucesos relacionados con los huesos de Carabanchel, un caso que siguió para el diario La libertad en 1923.
Poco antes de la Semana Santa de ese año, unos niños descubren dos pies y una mano que, según los forenses de Carabanchel, pertenecieron a una mujer joven mutilada cruelmente en vida. La investigación le correspondía al juez de Getafe. La Dirección de Orden Público destinó a los mejores agentes para resolver el presunto crimen antes de que estallase la alarma social. El suceso, a medio camino entre la crónica negra y la sátira costumbrista, es seguido por un joven ‘plumilla’ recién llegado a la capital para el diario La Libertad. Allí se integra en una de las redacciones más republicanas y combativas de la época de oro del periodismo español con figuras como Luis de Oteyza, Eduardo Ortega y Gasset, el fotógrafo Alfonso, Antonio Zozaya, Manuel Machado, Pedro de Répide, Luis de Zulueta, José Luis Salado, etc.
El juez de Getafe, Manuel González acudirá, finalmente, al médico forense de ese pueblo, José Sánchez-Morate, y al agente de policía, Gregorio Rajal, para zanjar un asunto que había trascendido a la prensa con polémica y, sobre todo, con peligro para sus aspiraciones políticas.
Todos los personajes deambulan, página a página, hacia un destino inexorable que no deja de hacer guiños y burlas; allá van todos hacia la muerte, la guerra civil, la huida, el exilio, la traición, el fracaso, los errores o la injusticia y la farsa. Son las muecas de los días. Una historia, más que trágica, real.
Esta novela histórica, o historia novelada, es un trabajo de tres años del autor aunque el título, ‘Las muecas de los días’, es parte de la cosecha intelectual del protagonista, Luis de Sirval. Los hechos se desarrollan a partir de una estructura que divide al libro en tres partes diferenciadas: ‘el asesinato del periodista en Asturias’ en 1934, ‘un lío de huesos’ en el Getafe rural de 1923 y un breve repaso al devenir de los personajes hasta donde ha podido entresacar el autor en las hemerotecas. La mayoría de los personajes, sus perfiles y sus trayectorias vitales son reales. Solo un pequeño porcentaje de personajes se han añadido para completar la trama y aliñar la salsa narrativa.