Dos Plenos en uno: ¿quién dijo miedo?

Después de un Pleno de siete horas y media (confieso que más de un rato me escapé porque mi salud mental peligraba y el estómago pedía cenar) y otro de ordenanzas (breve pero de ordenanzas, o sea de cifras) una servidora no se ve con la capacidad de escribir dos artículos. Así que ahí va un dos en uno: Asiento en los Plenos.

Pleno de Ordenanzas. Breve, sí. Denso, también. Es la época de las cifras, de IBI p’arriba, IAE p’abajo, numerito p’a un lao, o tasas p’a otro. El caso es que el borrador ha salido adelante. No era de extrañar: que al menos haya tiempo para que los vecinos puedan echarlo un ojo y presentar alegaciones si procede. Lo sorprendente es que el PP también se abstuviera en esta votación con lo malas, malas, malas que le parecían estas ordenanzas. O a lo mejor alguien se despistó y sin la batuta de Juan Soler se equivocaron de voto, cualquiera sabe. Y es que el exalcalde no completa un Pleno ni por equivocación. El récord ha sido el de hoy: cinco minutos para luego salir corriendo a la Asamblea y no quedarse ni a las votaciones en Getafe. Menos mal que de su voto no dependía nada… Cinco minutos que bien valen 285 euros, y una foto posando para su twitter. Hasta ahí la aportación.

Pleno ordinario. Demencial. Por momentos vergonzoso, por otros para echarse a llorar y la mayoría (y dada la hora) para dormir. Puntos estrella (en los que se suele liar): los despidos de LYMA y la comisión de investigación sobre el caso Jeromín. Para el primer punto, el PP estaba preparado: carteles en mano, público entregado copando la sala y todos a voz en grito exigiendo que se readmitiera a los trabajadores. Alguna que otra intervención apelando a que habían dejado a familias sin poder pagar la hipoteca, y bla, bla, bla… A una, que tiene memoria de pez, le cuesta recordar cuál era la sensibilidad del PP cuando los despidos eran al revés y redujo la plantilla de GISA. Va a ser verdad eso de que las cosas se ven diferente desde la oposición y el Gobierno…

También hubo lío en el caso Jeromín que trata de la «gula gastronómica o política de vientre» (Hugo Paternina). De nada valió que el asunto se hubiera archivado parcialmente en los tribunales, cuando alguien coje la senda… no la suelta. ¡Así que otra comisión de investigación (¿inútil?) a añadir a la lista! Y la cosa parecía que iba a terminar con cierto sosiego hasta que la alcaldesa tomó la palabra y comenzó a sacar Púnica, Gürtel… Y Juan Soler (sí, sí, estaba presente: solo un rato, luego ya se fue) se encolerizó como solo él sabe y tomó el micro para exclamar: «¡Falsaria! ¡Difamadora!». Y el lío.

También se mosqueó en estas el secretario del Pleno que ante las insinuaciones del edil de Ahora Getafe intervino para decirle que «a mí nadie tiene que dictarme nada: ni lo hacía el señor Soler ni lo hace Sara Hernández. Y el día que lo haga le diré… que no». Hay veces que los concejales se meten en unos charcos…

Luego se hablaron de muuuuuuchos temas. Que si memoria histórica en Getafe, que si alergias, que si Perales, también del IBI, de depuradoras… casi que les dejo a ustedes, lectores, que se deleiten con el que promete ser el vídeo más visto de la historia (#ironiaon): el del Pleno de este 4 de noviembre que publicarán en unas semanas. No voy a ser yo quien les robe el espectáculo.

 

Raquel González - Directora Getafe Capital