A diferencia de otros partidos políticos que únicamente buscan el enfrentamiento, el PSOE es la única formación que se atreve a decir claramente que existe un problema sobre la cuestión de Cataluña en todos los ámbitos de nuestro país.
Sin embargo las prioridades en Cataluña no pasan por separatismos, todo lo contrario, pasan por acercar posturas y encontrar un encaje que nos satisfaga a esos españoles que no queremos perder a Cataluña, y a la mayoría de catalanes que se sientan cómodos formando parte de España.
La singularidad de una región como Cataluña debe abordarse desde el Gobierno de la nación, que flaco favor nos está haciendo a todos, tensando a diario una cuerda que para una parte de los catalanes ha terminado por romperse. Lo más importante ahora es buscar el consenso, trabajar para salir de la crisis y que se creen nuevos puestos de trabajo en Cataluña y desde Cataluña. Todo lo demás responde únicamente a intereses personales y políticos.