Osama Abdul Mohsen y dos de sus hijos, ya son vecinos de Getafe. Su caso, entre los miles de refugiados sirios que buscan huir de la guerra, se hizo famoso internacionalmente tras recibir la patada de una reportera húngara cuando llevaba a su hijo pequeño en brazos. Después de eso se conoció su nombre, que era entrenador en su país de origen, y fruto de ello, la escuela Cenafe le trajo a Getafe para darle una segunda oportunidad a él y su familia.
Y ha sido ya en España donde ha recibido la segunda patada: en las redes sociales abundan los comentarios xenófobos contra su persona y donde la solidaridad se queda en un segundo plano. Pero los comentarios han ido más allá, y se está extendiendo un rumor en el que se vincula a Osama y su familia con el Estado Islámico. Un mensaje que parece proceder de grupos de extrema derecha y que ya circula descontrolado por la red. Una nueva zancadilla a Osama, esta vez, por las redes.
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