Soler y sus salidas de tono

Es muy penoso tener que soportar todavía a Juan Soler y sus salidas de tono. Debería aceptar, si no de buen grado sí educadamente, que, aunque es bien cierto que encabeza la lista más votada, no menos cierto es que los getafenses que no quieren que siga como alcalde son muchísimos más. Esta es la realidad por mucho que no le guste y prefiera pintarla de otro modo.

El resultado electoral no es “convulso” como él dice; es él quien lo puede convulsionar si sigue por la vía que ha elegido. ¿Cómo puede atreverse a decir que el PSOE es el partido más corrupto de España precisamente el día en que la Audiencia Nacional abre el juicio oral por el caso Gürtel y le exige al Partido Popular el pago de 1,2 millones de euros como responsable civil subsidiario? Para los que no lo tengan claro: en el PSOE, como en otros partidos y en otras muchas entidades y grupos humanos, ha habido a lo largo de su historia personas deshonestas que han aprovechado el lugar en que estaban para enriquecerse; incluso, es posible que el partido como tal no actuara en ocasiones con la firmeza y el rigor necesarios contra dichas personas y por eso tiene una responsabilidad que le ha llevado a ser rechazado por muchos y a perder elecciones. Pero el PP, y aquí está la enorme diferencia, está implicado como organización en una trama de obtención ilegal de dinero público y privado que ha utilizado para gastos propios del partido; por eso la Audiencia Nacional abre juicio oral contra los extesoreros del PP, Álvaro Lapuerta y Luis Bárcenas, así como al exgerente del partido, Cristóbal Páez, y «considera probada la existencia de una caja B en el PP que funcionó al menos desde 1990 hasta 2008 sirviéndose de diversas fuentes de financiación ajenas al circuito económico legal”.

El señor Soler debería pensar que quizá sean esas las razones que han llevado a la mayoría de los votantes de Getafe a pedirle que se vaya porque ya no quieren que sea su alcalde. Esas, que atañen al Partido Popular en su conjunto, y otras que él mismo ha generado en estos últimos cuatro años como, por ejemplo, el dinero que los contribuyentes hemos aportado al presupuesto municipal vía impuestos y tasas y que Juan Soler y su equipo no ha sabido o no ha querido gestionar debidamente y se ha quedado sin gastar para aquello que los getafenses necesitaban: 1.500.000 euros en fomento del empleo; 606.000 en ayuda a domicilio; 322.000 en prevención, inserción y promoción social; 315.000… y mucho más. Mientras, eso sí, adornaba nuestra ciudad con paraguas y colorines y él se iba a cenar a Madrid gastándose en restaurantes, taxis y otras gabelas unos 150.000 euros de esos mismos presupuestos tan pésimamente gestionados.

Supongo que le veremos poco por Getafe. No le imagino a usted, señor Soler, sentado entre los miembros de la oposición, con lo bien que se vive en el barrio de Salamanca yendo de vez en cuando a sentarse en el escaño de la Asamblea… Así que sea usted educado, no siga diciendo sandeces y váyase sin hacer ruido.