Durante dos años la empresa municipal Getafe Iniciativas (GISA) ha mantenido el alquiler del local que hace dos décadas ocupaba una galería comercial de la que hoy apenas queda un letrero desvencijado y que tiene salida a la calle Leganés y calle Estudiantes. El objetivo de pagar este alquiler que ascendía a 2.000 euros mensuales era acometer obras en este espacio para convertirlo en un vivero de oficios con puestos comerciales fijos e itinerantes y donde también se ubicaría un espacio multiusos diáfano, donde se desarrollarían ferias o presentaciones. Un espacio de más de 500 metros cuadrados en dos plantas (baja y sótano) para el que se encargó un proyecto de obras que tuvo un coste de 151.000 euros (IVA excluído). De hecho, las obras salieron a concurso por 514.000 euros en el mes de diciembre.
Apenas dos meses después, el concurso no se ha resuelto, pero en la fachada del local cuelga el cartel de “se alquila” y de hecho, GISA ya no mantiene este pago. Esto quiere decir que se han estado pagando dos años de alquiler (unos 50.000 euros) para un local que se ha mantenido vacío y sin uso; y que se ha contratado un proyecto de ejecución de más de 150.000 euros que parece que no se va a realizar.
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