Colocar a un español (Fernando Alonso) al frente de Airbus tras la dimisión de Domingo Ureña parecía haber pospuesto la batalla interna por el control de la entidad entre España y Alemania y que no conllevaría grandes cambios. Pero los informes a los que ha tenido acceso el diario ABC van en otra dirección: Alemania gana la batalla en la reorganización de tareas y controlarán los principales programas de aviación de España.
Ureña controlaba los aspectos de producción, ingeniería y comercialización de los aviones tanqueros (que se realizan en Getafe) y de las aeronaves de transporte militar C295 y A400M (ambas fabricadas en Sevilla). Un acuerdo que en la práctica se rompe y será desde Alemania desde donde se tomen las decisiones en este sentido. La responsable de la fase de producción y fabricación de los programas españoles estará instalada en Múnich y dará cuentas directamente al alemán Bernhard Gerwert, consejero delegado de la división Airbus Defence & Space. En breve el departamento de comercialización y venta también podría estar dirigido desde la ciudad germana.
De esta forma, el acuerdo al que se había llegado con la SEPI (Sociedad Estatal de Participaciones Industriales) que es accionista de Airbus, en el reparto de tareas, estaría siendo incumplido abiertamente. Sobre este asunto, ni el Gobierno del PP, ni la propia SEPI se han pronunciado.