El Gobierno de Juan Soler no ha querido jugársela en el próximo Pleno, al que llevará la aprobación de las ordenanzas municipales. Antes de aceptar las enmiendas que habían presentado UPyD (0,415%) o PSOE (0,420%) para bajar el tipo impositivo del prinicpal impuesto municipal, el IBI, ha decidido apuntarse el tanto y ‘autoenmendar’ sus propias cifras proponiendo un 0,414%, lo que supondrá que todos los recibos se verán reducidos en mayor o menor medida. De esta forma, el PP consigue asegurarse el apoyo de UPyD, que apostaba por reducir el tipo del IBI para que se beneficiaran todos los vecinos sin excepción. «Si votarámos en contra, se prorrogarían las ordenanzas de 2013, con el tipo del 0,436 con el consiguiente perjuicio para el vecino», adelanta Esperanza Fernández, portavoz magenta, que apoyará los números propuestos por el Gobierno.
«Se ha recogido también la modificación de las plusvalías en caso de ejecución hipotecaria y estaremos pendientes de cómo se gestionan las ayudas al impuesto de bienes inmuebles, que se dieron de forma lamentable, cubriendo tan solo 6.000 euros de los 50.000 presupuestados y con unos criterios muy restrictivos. Se deben extender estas ayudas no solo a desempleados, sino también a personas con rentas bajas», asegura la edil.