Si ayer la propia Teresa Romero hablaba de que se encontraba mejor, hoy su estado ha empeorado sustancialmente, hasta el punto de que han llamado al hermano de la enfermera afectada por ébola para que acudiese al hospital. La auxiliar, que está ingresada desde el pasado lunes, registra problemas pulmonares, como aseguró su propio hermano a la salida del centro, aunque no esta intubada, como se dijo en un principio.
Hay siete personas ingresadas en el Carlos III en aislamiento, después de que se diera el alta a dos de ellos que se confirmó que no tenían la enfermedad. El marido de la afectada, y los médicos que la antendieron en el hospital de Alcorcón y en el centro de salud donde acudió, son algunos de los ingresados. Ninguno presenta síntomas, aunque están aislados por prevención. Otras 80 personas están siendo vigiladas por si presentan síntomas.