El malestar por los ruidos en la calle o viviendas a altas horas de la madrugada y la inacción de las autoridades al respecto, han centrado algunas de las quejas que se han trasladado a la portavoz de UPyD, Esperanza Fernández en la jornada de puertas abiertas celebrada ayer. “UPyD lleva meses recibiendo quejas en este sentido y por ello hemos pedido, presentando una enmienda a la ordenanza de Medio Ambiente, que se regule esta cuestión”. La falta de regulación imposibilita a las autoridades a tomar medidas y poder atajar estas actuaciones, que hasta ahora no regula ninguna ordenanza.
Los vecinos también han trasladado la queja de la escasa frecuencia de paso de las líneas de autobuses en general y, en particular, de la L4. En Los Molinos, los vecinos aseguran que el paso se produce cada 30 o 35 minutos, lo que penaliza aún más a un barrio que ya de por sí cuenta con escasas alternativas de transporte público.
Por su parte, una vecina de Perales del Río ha explicado que cuando fue a vivir al barrio podía ir caminando al Cerro de los Ángeles y disfrutar de su entorno, pero que tras la construcción de diversas infraestructuras no hay posibilidad de acceso al mismo, salvo cruzando “una especie de túnel-desagüe oscuro, pequeño y lleno de desperdicios o caminando sobre una carretera de doble sentido sin arcén”. Por ello, ha solicitado que se habilite un paso que conecte ambos entornos.
Otras de las quejas recibidas han sido referentes a la mala calidad del mobiliario urbano recientemente instalado en la plaza de Las Eras y el parque José Heredia, las molestias provocadas por las obras de la avenida de la Libertad o la denuncia sobre despidos disciplinarios en Lyma, que a juicio de los afectados son selectivos ya que entre personas que han cometido la misma falta unos son despedidos y otros no.