Esta misma mañana confirmaba Rajoy que la reforma de la ley del aborto se quedaba en un cajón. Y Alberto Ruiz-Gallardón no ha demorado su decisión y ha presentado su dimisión. El ministro de Justicia se ha sentido desautorizado en los últimos días al no estar respaldado en una propuesta en la que ha puesto en juego gran parte de su crédito político y a cuya defensa se había entregado en los últimos meses buscando ganarse el favor de la derecha más radical del partido.
La decisión parecía estar tomada: Rajoy había decidido no presentar el proyecto de ley, a pesar de que estaba en su última fase de tramitación; y Gallardón ya le había adelantado que si esto era así, no continuaría en el cargo. También ha renunciado a su escaño en el Congreso y ha anunciado que dejará la política después de tres décadas.