Pantallas sí, pantallas no. Aficiones mezcladas o no. Fútbol o reflexión electoral. La polémica está servida a tres bandas: Comunidad, Ayuntamiento y Delegación de Gobierno. Ignacio González anunció unilateralmente la intención de retransmitir la final de la Champions League del próximo 24 de mayo en una gran pantalla en Sol, y trasladó el asunto de la seguridad a la Delegación de Gobierno. Cristina Cifuentes, la responsable de este área ha dejado con la boca abierta al presidente regional al solicitar que pida autorización a la Junta Electoral Provincial, al tratarse de la jornada de reflexión, y también al Ayuntamiento de Madrid.
La respuesta del Gobierno regional no se ha hecho esperar, al asegurar que la delegada «ha querido echar balones fuera» cuando es una competencia suya. Y Cifuerntes no se no quedaba atrás: «¿A alguien se le ocurriría concentrar en la Plaza de Mayo de Buenos Aires a las aficiones del River y del Boca, o en cualquier plaza londinense a los seguidores del Arsenal y del Chelsea para presenciar un partido entre ellos?». Reunir a ambas aficiones en el mismo espacio puede ser una bomba de relojería.
La batalla en este caso la ha ganado Cristina Cifuentes tras anunciar Ignacio González que renunciaba a poner la pantalla gigante, ante la postura de la Delegación de Gobierno.