Afectados de Sareb, esperanzados frente al día 27

El 27 de mayo puede ser el día en que se ponga un punto (al menos aparte) al sufrimiento de los afectados por la parcela A-5 de Los Molinos. La reunión «un tanto surrealista» con el Sareb esta semana puede dar sus frutos y están citados nuevamente con el ‘banco malo’ el próximo martes. Es la fecha que se han marcado para estudiar definitivamente si aceptan la propuesta de los 140 propietarios de vivienda que recogieron los 3,1 millones de quita sobre el precio de las viviendas a cambio de acabar ellos mismos las obras, algo que supondría unos dos millones. Esa oferta, que hizo el propio Sareb, es la que ahora trata de dar marcha atrás: «En la reunión nos dijeron que se había tratado de un error el hacernos esa oferta», explica Ruth Holgado, portavoz de los afectados. «Incluso plantearon que iban a ser ellos los que acabarían las obras», una oferta a la que los afectados asistieron incrédulos después de meses negándose a ello el Sareb ya que «decían que ellos no eran una constructora».

El Sareb sin embargo, cedió: «Nos han asegurado que van a estudiar nuestra propuesta y nos han citado de nuevo el 27 de mayo para darnos una respuesta». Los propietarios de las viviendas, que llevan más de 60.000 euros desembolsados y que han tenido que vivir dos quiebras de las empresas encargadas hasta dar con su vivienda en el ‘banco malo’, están «esperanzados». Confían en que la batalla esté próxima a finalizar y se acepte la petición que han consensuado entre todos.

La movilización ciudadana es lo que trata de evitar el ‘banco malo’, que después de haber visto como un centenar de personas se reunían frente al Ayuntamiento de Getafe, pidió que se desconvocara la concentración prevista ante las puertas del Sareb esta misma semana. «La hemos pospuesto para el 4 de junio». Siguen peleando. No quieren más retrasos y quieren que sus viviendas, prácticamente acabadas, se terminen finalmente y puedan acceder a ellas.

Están recibiendo el apoyo del PSOE y de IU, que en este caso va a llevar su caso a la Asamblea de Madrid «para instar a Sareb a que resuelva esto ya».