Van cumpliendo etapas, y cada una de ellas es un éxito que echarse a las espaldas y una responsabilidad para el futuro. Cuadernos del Matemático cumple 25 años, un cuarto de siglo, apostando en este tiempo rodeado de crisis y economía por algo tan primitivo y fundamental como la poesía. Puede parecer que tiene poco público, que es un tema minoritario, y seguramente es así. Pero han sabido hacerse fuertes ante la adversidad, seguir creciendo y cumpliendo años. Esta revista nacida al abrigo del instituto Matemático Puig Adam (de ahí su nombre), ha crecido en relevancia, y es una de las lanzaderas para los jóvenes poetas que quieren dar sus primeros pasos en el mundo del verso.
Veinticinco años son una fecha para celebrar. Y lo van a hacer doblemente este sábado 10 de mayo. La primera cita será en el Teatro García Lorca a partir de las 20 horas, donde a las explicaciones de los protagonistas de esta revista, con su director Ezequías Blanco como maestro de ceremonias, se unirá la proyección del documental Solo quiero caminar, de Rufo Pajares, cerrando la tarde con la actuación de Carmen Linares.
Luego vendrá el cierre de noche, ya en el Restaurante-Bar Deolvido, donde se podrá contemplar una exposición conmemorativa de estos 25 años, así como asistir a la actuación de Susana Ruiz Trío y a una Jam Session de poesía, con proemas breves, y preferiblemente jocosos.
Una notoria y feliz diferencia —una más— entre otros empeños y el de la revista Cuadernos del Matemático es que esta sigue cumpliendo años. Van veinticinco. Cinco más desde la última vez que lo celebramos. A poco de comenzada la segunda parte del Quijote, y cuando Sancho Panza satisface al bachiller Sansón Carrasco de sus dudas y preguntas, éste le informa de que algunos dicen por ahí que «Vengan más quijotadas: embista don Quijote y hable Sancho Panza, y sea lo que fuere; que con eso nos contentamos». Por cierto, Sansón Carrasco tenía veinticuatro años, uno menos que Cuadernos del Matemático. Así que, vengan más «Noticias de… » tantos en forma de poemas, tantos cuentos, más cuadernos de «Lavarquela» y más ensayos y reseñas críticas de libros y libros. Vengan, que con eso nos contentamos. Felicidades. Además, felicidades porque este número especial viene lleno de un montón de textos de mucho interés. Son muchos. Hoy me apetece citar un poema sin título de María Ángeles Pérez López (pág. 132). Es un poema sobresaliente, dedicado a Chantal Maillard, y es un poema necesario; que hoy, de haberse dado de otro modo las cosas, habría llevado —también pensé en un texto de Elena Poniatowska— a la lectura pública que todos los 23 de abril organiza el Gran Teatro de aquí, de Cáceres. La cubierta de este número tan especial de Cuadernos del Matemático va ilustrada con la reproducción —fotografía de Paco Rivera— de una pieza del escultor y pintor Antonio López y —en la cuarta— con una instantánea del propio Antonio López en el patio de su casa ante una de sus cabecitas infantiles en alabastro. Dentro, sin dejar al artista manchego, el texto «Compleja sencillez del arte», de Tomás Marco, es como un segundo editorial de esta celebración de 228 páginas de otro cumpleaños. Felicidades, Ezequías y Zía.