El PSOE ha presentado demanda de conciliación exigiendo al alcalde, Juan Soler, y a la directora de Comunicación del Ayuntamiento, que «se retracten y reconozcan públicamente la no participación de los concejales socialistas en una agresión al concejal de Seguridad que tuvo lugar el pasado mes de septiembre». Una nota de prensa remitida por el Servicio de Comunicación municipal culpando a concejales socialistas de los incidentes ocurridos en el pregón de las fiestas del Sector III, donde hubo un altercado con el concejal de Seguridad, José Luis Casarrubios provocó la denuncia del PSOE en Comisaría, tras la cual se abrió un proceso judicial en el que declaró como imputada la directora de Comunicación. Ahora el PSOE abre otra vía al presentar una demanda de conciliación en la que buscan las disculpas oficiales del alcalde, argumentando que la agresión que se produjo «no fue denunciada por la víctima y sobre la que los informes policiales resultan taxativos al negar participación alguna, directa o indirecta, de los concejales socialistas en la organización de las reivindicaciones ni en los hechos posteriores». En caso de que dichas disculpas no se produzcan, «se presentará la correspondiente querella penal contra el alcalde, Juan Soler, y contra su cargo de confianza responsable de la autoría de la mencionada nota de prensa».
Juan Soler ha ofrecido su versión de los hechos restando importancia a una nota de prensa que, según su valoración «era un relato de hechos. Parte de los manifestantes agredieron al concejal de Seguridad, le rompieron las gafas, le hicieron una pequeña herida en el rostro. Y los concejales de la oposición que allí estaban no hicieron absolutamente nada para evitar aquella actuación de sus compañeros de manifestación». Ha destacado en su respuesta que la «denuncia la lleva el juez decano. Relatar un hecho que es cierto no creo que tenga una continuidad en los tribunales más allá de lo que ya conocemos», sentencia.
La nota, remitida el 20 de septiembre y todavía publicada en la web municipal decía textualmente: “La secretaria general de los socialistas de Getafe y concejala del Ayuntamiento Sara Hernández, el portavoz del grupo socialista, José Manuel Vázquez, así como los concejales Cristina González y Enrique Heras, se encontraban al frente de la manifestación, por lo que con su actuación, han legitimado la agresión al concejal de Gobierno José Luís Casarrubios”. La denucnia fue presentada por injurias, calumnias y acusación y denuncia falsas.
En este comunicado se acusa a la izquierda de comportarse “como quinquis y utilizando la violencia y la agresión a un concejal como acción política”, a la vez que insistía en que el Ayuntamiento “no tolerará la dictadura de una minoría”. También les acusaba de que “han organizado un circo violento que ha impedido la vida pacífica de los ciudadanos de Getafe y que propiciaron numerosas situaciones graves de peligro tanto para el tráfico como para los viandantes”, e incluso en la nota de prensa se sugiere que pueden tener que ver en “el intento de incendio del polideportivo San Isidro, además de los continuos sabotajes y actos vandálicos contra cualquier acto o iniciativa municipal”.