El alcalde Juan Soler manifestó abiertamente su indignación por «el despotismo de alguna persona y alguna portavoz que llega a límites insospechados. Es una falta de cortesía, de cintura política y de saber hacer». El motivo de su enfado es el punto 19 del Pleno que se desarrollará mañana en el que el grupo municipal socialista «insta la modificación del acuerdo sobre los cargos a desempeñar en régimen de dedicación exclusiva», cita literalmente la propuesta que pretende repartir el salario que tenía uno de los concejales que han dimitido en dos mitades para que puedan cobrar dos de los nuevos. «Esa es una prerrogativa del alcalde y me ha molestado profundamente que ni siquiera lo hayan consultado». Ha solicitado ya al secretario del Pleno que este punto sea retirado por no cumplir la legalidad. «Se van a mantener las liberaciones pero no se van a repartir. Esto no es una carnicería donde se pida cuarto y mitad».
Sin embargo, el alcalde no podrá retirar el punto unilateralmente, ya que firmó el orden del día sin poner objeciones a este punto, cuando se convocó el Pleno el pasado viernes. El acuerdo que mantienen en la junta de portavoces es que los puntos solo se retirarán a instancias del proponente, y en el caso de que no se atienda este acuerdo, como mucho se tendrá que votar para que el Pleno manifieste si quiere que se retire. Desde el PSOE aseguran que el portavoz del PP no puso ningún impedimento a la redacción del punto y que no tienen intención de retirarlo, sin entrar a valorar la falta de comunicación entre el alcalde y su portavoz.