Se formaliza la acusación contra los sindicalistas de EADS

Ya había adelantado GETAFE CAPITAL que el procedimiento estaba próximo a concluir, pero no ha sido hasta esta semana que se ha emitido el auto judicial que acusa formalmente a sindicalistas de EADS por los incidentes ocurridos en la huelga de septiembre de 2010 en el que hubo cargas policiales a la puerta de la factoría y llegaron a dispararse siete tiros al aire. Una vez terminada la instrucción, el fiscal ha emitido su escrito de acusación, que se ha trasladado a las partes y que finalizará en el juicio penal donde se decidirán las responsabilidades de cada cual.

Raquel Plaza, secretaria de organización de CCOO en EADS, narraba hace unos meses los momentos de tensión que se vivieron allí. “Estábamos unos 300 trabajadores dentro de la factoría. Uno de los empleados que quería entrar echó a correr hacia los que  estábamos dentro, y los policías entendieron que había alguna agresión, y cargaron”. La situación se descontroló, los trabajadores se replegaron, y “la policía volvió a cargar”, la puerta casi se cerró, un policía cayó al suelo y los agentes  retrocedieron para salirse de las instalaciones. Ahí fue cuando se produjeron los disparos al aire. “No se sabe quién disparó”, porque “no hay investigación, al menos pública, respecto al desastre organizativo que tuvo la policía, con cargas a lo loco y dejándose a los compañeros por el camino”. Plaza defiende que en todo momento “nosotros estábamos con las manos en alto”. El resultado entre los huelguistas fue de varios contusionados y de tres trabajadores con brechas en la cabeza que acuden al servicio médico y “hasta que no aparece la denuncia más tarde no sabemos que hay un policía herido”. De hecho, a la factoría “no acudió ninguna ambulancia. Aquellos disparos había que justificarlos y eso es lo que lleva a los policías a denunciar”, lamentan desde el sindicato.

Falta saber cuál será la respuesta de los sindicatos ante esta resolución judicial que sentará en el banquillo a ocho compañeros, siete de CCOO y uno de UGT. El caso se ha remitido al Juzgado Penal que será el encargado de establecer los siguientes pasos.