La Empresa Muncipal de Suelo de Leganés (EMSULE) ha optado por dar marcha atrás en su proyecto de viviendas tuteladas y retirar la propuesta que se había encontrado con los recursos tanto de ULEG cmomo del Colegio de Arquitectos. Tanto el planteamiento, como la justificación de estas obras que tenían un presupuesto cercano a los 10 millones de euros, podían haber incurrido en ilegalidades como «que el precio solo supusiera el 40% en la valoración, además de unir en un único concurso y pliego la redacción del proyecto y la ejecución del mismo, limitando en la práctica a unas determinadas empresas constructoras el llevar a cabo la obra y dejaba sin derecho a concursar a cientos de arquitectos y estudios de arquitectura que no van de la mano de determinadas constructoras», defiende ULEG.
«La gestión del presidente de Emsule y edil de Urbanismo, Miguel Ángel Recuenco está siendo inquietante. Es vox populi el nerviosismo y la extraña actitud que mantiene últimamente incluso con miembros de su propio gobierno. También es vox populi que su anterior trabajo como abogado y su relación con los «popes» del sector podría estar condicionando sus actuales decisiones en multitud de materias a su cargo», aseguran desde el partido independiente, que llevan reclamando meses documentación de EMSULE y cuentas, y reciben el silencio como respuesta.
Desde el partido vecinal se exige que se asuman responsabilidades políticas por este batacazo y se alerta de que «puede costar nuevos gastos por las posibles indemnizaciones a las empresas que ya han presentado sus proyectos».