El ‘caso nóminas’ de Leganés sigue creando discrepancias entre los protagonistas a costa de la terminología. En la providencia, que no ha sido facilitada a los medios, que dicta la jueza del número 5 menciona al alcalde como imputado al admitirle como parte en el juicio por el pago de las nóminas de cuatro directores generales del municpio. ULEG ha salido al paso asegurando que está «superimputado» y desmontando la teoría del propio Jesús Gómez que asegura que no hay «ningún auto de imputación». «Caro que no lo hay», certifica Carlos Delgado, portavoz de ULEG, «pero en esa providencia deja claro que está imputado y ni se ha impugnado ni se ha anulado. Los jueces no se manifiestan por notas de prensa», advierte. El TSJM emitió una nota en la que aseguraba que no había auto de imputación.
En el expediente de esta causa abierta, figura además de la providencia, una solicitud del alcalde Jesús Gómez de entrevistarse personalmente con la jueza que lleva el caso en un intento, según Carlos Delgado de «condicionarla e influirla. Pero a la jueza no debe gustarle mucho su petición porque en menos de 24 horas y con dos escuetas líneas le responde que no ha lugar la petición. ¿Se imaginan a Bárcenas pidiendo reunirse en privado con el juez que lleva su causa?», ha comparado. Hay un segundo escrito del alcalde en la que remite a la jueza su carné de diputado de la Comunidad de Madrid, para mostrar su condición de aforado. «Y todo esto cuando fue el propio alcalde el que se puso la soga al cuello al personarse en la causa: solo podía hacerlo como testigo o como imputado». Delgado además, asegura que no entiende «por qué es el jefe de la asesoría jurídica del Ayuntamiento, pagado por todos los leganenses, el que tiene que defender al alcalde en en este caso». Al final, en lo que quiere incidir ULEG es que «la juez abre diligencias porque ve indicios de que se está haciendo algo mal. Eso es lo importante, no si el alcalde está imputado o no».