Las Margaritas se ha cansado. Quieren «que se preocupen por este barrio, que no nos tengan olvidados». Es un llamamiento casi a la desesperada de los vecinos, que han decidido tomar cartas en el asunto. Han constituido una plataforma en la que quieren unir fuerzas para que el barrio sea el que siempre fue: humilde y trabajador, pero decente. Lola Fernández es la portavoz de este grupo de gente que en la primera convocatoria ha logrado reunir a 60 vecinos en torno a una mesa para debatir los problemas y sus posibles soluciones. No piensan parar. Detrás no tienen siglas, ni asociaciones de vecinos, ni otros grupos. «Solo somos vecinos que queremos luchar por el barrio».
La situación que describe Lola es preocupante, cuanto menos. «Tenemos un problema grave de droga: se trapichea con ella y se consume en la puertas de las viviendas. Los robos han aumentado, la limpieza es un desastre, hay muchos niños que no van al colegio…» ennumera, a la vez que incide una circunstancia novedosa, fruto de la crisis de estos tiempos: los pisos okupados. «Por lo menos tenemos 130 pisos en esta situación en el barrio. Les dan una patada y se meten. Lo tienen organizado e incluso cobran un alquiler mensual a los inquilinos», que en muchas ocasiones no cumplen las mínimas normas de convivencia.
Echan de menos a la policía. «Antes les llamabas y venían, pero desde hace unos años, la mayoría de las veces ni aparecen». Han remitido escritos precisamente a la Policía Local y también a Parques y Jardines poniendo en conocimiento la situación que atraviesan. «Vamos a recoger firmas, también haremos una concentración en la plaza de Las Margaritas, y si hace falta nos manifestaremos en la puerta del Ayuntamiento». En estos pasos iniciales, se está poniendo en contacto con los comercios, con los AMPA, con los administradores…
Al final, sienten que les están echando del barrio. «Tenemos miedo. Mi hija no baja a la calle. A una mujer ciega le robaron los pendientes a punta de navaja; a otra vecina le atracaron y se llevaron el collar que llevaba… Las aceras están en una situación deplorable y la gente se cae». Incluso ella misma ha recibido amenazas por poner en concocimiento estos problemas ante una televisión. Pero han dicho basta. La próxima cita será el 24 de octubre a las 18.00 horas, en el centro cívico del barrio. Las Margaritas se mueve.
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